Dongou es la luz de la esperanza

Muchas conclusiones, y casi todas negativas, son las que se pueden extraer después del mal partido que protagonizó el Gimnástico de Tarragona este sábado contra el Lorca, duelo que acabó 0-2, con la afición muy fastidiada y con un malestar que no se olía desde el tramo final de la etapa de Lluís Carreras en el banquillo.

Pero también hay alguna cosa positiva. Y esta, es de las grandes. Seguramente, para muchos será sólo un detalle, una anécdota, pero dentro del club están más que felices con esta circunstancia. Se trata del debut de Jean Marie Dongou con la camiseta del Nàstic. El delantero camerunés ya está de vuelta.

Después de superar la grave lesión de rodilla sufrida la pasada temporada vistiendo la camiseta del Real Zaragoza, el delantero volvió a sonreír. No por el resultado del Nàstic, nefasto, sino por el hecho de volver a sentirse futbolista. Seguramente, son sensaciones que se pueden igualar a pocas en el «mundo real», lo que no está ligado en el ámbito futbolístico.

Transcurría el minuto 58 de partido cuando, justo antes del primer gol del Lorca, Rodri decidió ingresar en el campo Dongou, por Abraham Minero. Tenía que ser un gran debut, ante la afición y, si pudiera estar participando en algún gol, pues mejor. Pero no acabó siendo así. Un minuto después del ingreso en el campo del camerunés, Apeh marcó el primer gol de los visitantes. Tocó ir a remolque, y Dongou no acabó de estabilizarse en el campo. Jugando arriba, no se entendió todo el que hubiera querido con Barreiro, pero el hecho de que haya jugado ya es un paso. Y es que Jean Marie Dongou es uno de los que se podrían denominar «fichajes» del mercado de invierno, ya que ha llegado casi en diciembre y, si consigue estar a su nivel, lo que demostró a las categorías inferiores del Barça y que también dejó vislumbrar al filial azulgrana durante cinco temporadas, hay delantero para rato. Delantero, o extremo, donde se lo quiera utilizar.

La baja de Ike Uche puede abrir las puertas de la titularidad al joven delantero de 22 años de cara al partido del viernes en Pamplona contra el Osasuna. Dependerá de Rodri, pero sería una locura no contar con un futbolista que, si está por|para los 90 minutos, tiene que ser uno de los escogidos para salir de inicio. Ahora, falla|falta saber qué decide el técnico.