Todo el mundo resucita contra el Nàstic (2-0)

No hay manera. Cada vez que el Nàstic intenta sacar la cabeza, acaba decepcionando. Además, el tarraconense se ha convertido en un conjunto especialista a resucitar en otros equipos que pasan por un mal momento. En el caso de este domingo, la Cultural acumulaba trece enfrentamientos sin conocer la victoria, un triunfo que sí llegó ante los tarraconenses.

Tres meses sin sumar un triunfo por parte de un equipo que pasó por encima en todos los sentidos de un Nàstic impotente y sin ningún tipo de idea. Un tímido chute de Gaztañaga a los 24 minutos de juego que el meta local paró sin despeinarse y un tiro de Barreiro en las postrimerías del duelo, cuando todo estaba sentenciado, fueron las únicas ocasiones, si es que se puede llamar así, de un Nàstic que pasó como un fantasma por el Reino de León.

No quiso complicarse la vida Rodri, técnico de los tarraconenses. Si el equipo derrotó la pasada semana al Sevilla Atlético, no eran necesarios los cambios. Ahora bien, uno sí que era necesario y obligatorio, ya que Stephane Emaná, con la clavícula rota, no podía entrar a la convocatoria. Manu Barreiro volvía, pues, a la titularidad, para convertirse en el 50 por ciento de la mejor delantera del Nàstic y una de las mejores de la categoría. Él y Uche hacen mucho mejor en el Nàstic cuando juegan juntos.

Repetía Rodri, pues, la pareja de centrales Bruno Perone-Daisuke Suzuki, pasando a Xavi Molina en el centro del campo, igual que contra el filial sevillista. Sólo quedaba Carlos Blanco como único central en la plantilla, pero Rodri lo dejó fuera de la convocatoria. El técnico grana decidió convocar a Iván De Nova, futbolista del filial, en un claro mensaje en Blanco: no encaja y se tiene que buscar un nuevo eequip en este mercado de invierno.

Volvía a jugar Jean Luc, el cual tenía en el suyo delantera una gran oportunidad por reivindicarse y, en la otra banda, a la izquierda, un Maikel Mesa que volvía a jugar lejos de su posición natural.

La lesión y la ocasión

Muchas cosas sucedieron en la primera mitad. Lo más importante fue, que a pesar del mal juego del Nàstic y las oportunidades de que disfrutaron a los leoneses, el marcador no se movió durante los primeros 45 minutos. Los tarraconenses entregaron la pelota al rival en los primeros minutos, y este no lo supo aprovechar. Después del cuarto de hora inicial, completamente local, diez minutos en que el Nàstic intentaba salir con la pelota y sin tanto miedo, pero la reacción local no tardó en llegar. El delantero Rodri Ríos se plantó delante de la portería y disparó, convirtiendo a Dimitrievski en protagonista involuntario. Desvió la esférica y, en segundo término, disparó Buendía, pero su rasgo|tiro se marchó muy desviado por encima de la meta del macedonio.

Por su parte, la única llegada grana, más que tímida, la protagonizó Jon Gaztañaga, disparando el rebote de un córner, aunque Jesús Fernández paró la esférica sin problemas. El Nàstic no conseguía trenzar ninguna jugada ni encontrarse a sí mismo. La defensa era lo que más funcionaba, con un Suzuki erigiéndose el líder. A Perone le costaba jugar al perfil izquierdo y Kakabadze buscaba acciones y driblings innecesarios que, en más de una ocasión, casi costaron un disgusto.

Manu Barreiro y Uche, completamente solos, no encontraban la manera de recibir pelotas. Primero, porque el Nàstic no jugaba por el suelo y, segundo, porque tenían que corregir en demasiadas ocasiones las escapadas de Jean Luc, muy dinámico, pero igual de desordenado.

En el último minuto del primer acto pasó casi de todo. Minuto 44, y Abraham Minero entra por Javi Jiménez. No fue un cambio táctico, ya que el joven lateral izquierdo había caído lesionado cuatro minutos antes después de un choque. Y, el segundo disgusto, casi llegaba un minuto después. En un error defensivo del Nàstic, Señé se quedó completamente solo delante de Dimitrievski. Y el macedonio, nuevamente, salvó a los suyos. Le adivinó las intenciones al rival y salvó el uno contra uno. Por lo tanto, lo mejor al descanso, el empate sin goles.

Empiezan mal

Los primeros cinco minutos del Nàstic en la segunda mitad fueron todavía peores que los de la primera. Si en vez de la Cultural Leonesa hubiera habido un equipo con las ideas más claras en frente, quizás Dimitrievski habría tenido más problemas, pero no fue así.

El partido entró en una fase más tibia a partir de entonces, y fue cuando Rodri buscó un revulsivo. Al cuarto de hora del segundo acto, Jean Marie Dongou entraba para|por Uche. Hombre por hombre. El dibujo no variaba, y el nigeriano salía después de no poder haber entrado en juego durante la hora que estuvo sobre el césped.

Pero no tuvo casi tiempo de respirar cuando la Cultural se adelantó en el electrónico. Enèsima error de Bruno Perone, fatal en el Reino de León, que acaba en córner. Y, el córner, en gol de cabeza de Iván González. Parecía que Dimitrievski podría haber hecho algo más, pero el meta estaba muy tapado por algunos jugadores.

Donde sí que falló el meta macedonio fue en el segundo de los goles de los leoneses. Nueva pérdida de pelota en la medular, que no sabe parar el Nàstic, hecho que facilitó la llegada de Isaac Carcelén por banda izquierda. Cuando estaba relativamente cerca del portero del Nàstic, disparó al palo corto, y el meta no la paró, cuando|cuándo parecía que podría haber hecho alguna cosa más. El autor del gol es el mismo Carcelén que la temporada pasada, en el mercado de invierno, estuvo a punto de fichar por el conjunto tarraconense, una contratación que se rompió a última hora.

Sin Molina

Con el partido casi acabado, una nueva mala noticia en forma de baja de cara al próximo partido en el Nou Estadi. Xavi Molina, a seis minutos del final, vio una cartulina amarilla, que es la quinta en lo que va de temporada. El de la Canonja, en un momento de forma, dejará a su equipo cojo.

FICHA TÉCNICA

Cultural Leonesa. Jesús Fernández, Isaac Carcelén, Albízua, Iván Garrido, Víctor Díaz, Mario Ortiz, Delgado, Señé, Samu (Guarrotxena, 60) Buendía (Aridai, 82) y Rodri (Martínez, 90).

Nàstic. Dimitrievski, Kakabadze, Daisuke Suzuki, Bruno Perone (Eddy Silvestre, 68), Javi Jiménez (Abraham Minero, 44), Jean Luc, Gaztañaga, Xavi Molina, Maikel Mesa, Manu Barreiro y Uche (Jean Marie Dongou, 60).

Goles. 1-0, Iván González (64); 2-0, Isaac Carcelén (72).

Árbitro. Víctor Areces Franco (asturiano). Mostró la tarjeta amarilla en los locales Rodri y Yeray; y a los visitantes Kakabadze y Xavi Molina.

Incidencias. El Reino de León acogió a 6.833 espectadores.