El Nàstic se encontrará a un Albacete que da miedo desde que llegó Enrique Martín

¿Recuerdan aquel Albacete Balompié que perdió en el Nou Estadi (3-1) en la quinta jornada del campeonato de Liga, coincidiendo con el estreno de Rodri como entrenador del Nàstic? Pues no tiene absolutamente nada que ver con el equipo en el cual los tarraconenses se enfrentarán este domingo a Carlos Belmonte (doce del mediodía).

José Manuel Aira no pudo mantener la presión de ser un recién llegado a la categoría de plata y fue destituido cuando sólo se habían disputado siete enfrentamientos. En estos siete duelos, los resultados fueron nefastos: cinco derrotas, un empate y una única victoria. Por cierto, un triunfo contra el actual tercer clasificado, un Real Oviedo que ahora lucha por subir directamente a Primera División.

El 5 de octubre del 2017, Aira fue relevado por un Enrique Martín que empezó pisando muy fuerte, y haciendo bueno aquel dicho de «Nuevo entrenador, victoria segura». El Albacete derrotó en el Lorca en el Belmonte (2-1). La siguiente jornada, derrota en Pamplona contra Osasuna y, acto seguido, una gran racha de siete partidos sin perder que alejó a los manchegos de la zona de descenso.

De hecho, desde la llegada d'Enrique Martín se han perdido cuatro partidos. Cuatro, en dieciocho partidos jugados, unas cifras espectaculares teniendo en cuenta que, en los siete anteriores, se habían perdido hasta cinco.

El técnico, todo carácter, es un entrenador bastante peculiar que ya consiguió una impresionante hazaña hace dos temporadas. En el banquillo de Osasuna, superó una mala racha de resultados a la primera vuelta, para llegar, por los pelos, a la promoción de ascenso a la finalización del campeonato regular. Como quedó sexto, se enfrentó al tercero clasificado, el Nàstic de Vicente Moreno, el cual no pudo frenar el impulso de un Osasuna que, a pesar de llegar el último a la promoción, consiguió el ascenso a Primera. Una vez a la máxima categoría, Enrique Martín duró pocas semanas, ya que fue destituido a causa de los malos resultados.

Enrique Martín es un entrenador que muchos querían para el Nàstic, pero que nunca entró en las quinielas|travesías|traviesas del Consejo de Administración grana. En Tarragona se buscaba un técnico de un perfil diferente. Es la decimotercera temporada que entrena a la Segunda División A, y ha pasado por banquillos como las de Leganés, Burgos, Terrassa, Xerez y Numancia.

Cinco defensas

Los equipos d'Enrique Martín, como el Albacete, tienen la peculiaridad de jugar de una forma muy específica. Muy agresivos con la pelota y sin ella, son innegociables los tres centrales y los dos carrilers, ya que aportan la solidez defensiva que busca un técnico que quiere contar con futbolistas que recorran arriba y abajo las bandas durante los 90 minutos. Bittolo y Cifuentes, en los carriles, apuntan a ser los hombres peligrosos por banda, mientras que siempre se tiene que ir con cuidado con Néstor Susaeta, todo un especialista en acciones en pelota parada y un jugador que puede crear peligro desde cualquier zona del campo.

Sin Erice

El futbolista que ofrece el equilibrio en el centro del campo, Jon Erice, no podrá participar en el partido, al estar sancionado, pero sí que estarán presentes los dos futbolistas más temibles del conjunto manchego. El delantero Béla es una de las sensaciones de la temporada. Sus movimientos, y la facilidad con la cual llega a la portería rival lo convierten en un futbolista a tener muy en cuenta para los centrales del Nàstic, ya sean Pleguezuelo y Xavi Molina o lo sean otros.

Pero el peligro personificado del Albacete es Roman Zozulya, máximo artillero del equipo con siete dianas anotadas, y uno de los mejores futbolistas de la categoría de plata. En el Nou Estadi ya marcó, y sólo su presencia ya atemoriza a cualquier rival que se le plante en frente.

Tomeu Nadal

El portero del Albacete es un viejo conocido de la afición del Nàstic. Se trata de Tomeu Nadal, uno de los metas más queridos de la última década en Tarragona y que participó en el retorno del equipo a Segunda División A. Desde su llegada a Albacete, se ha convertido en un futbolista imprescindible, en un jugador que disputa todos los minutos que ha encajado 23 goles en 23 partidos disputados.