El Nou Estadi pudo ver tres goles (de los suyos) seis meses y medio después

Apoteósico partido el que vivieron los aficionados del Nou Estadi este domingo, en la goleada del Gimnàstic de Tarragona ante el Lugo (3-0). No tendría tanta trascendencia lo que sucedió al campo si no fuera porque desde el mes de diciembre el Nàstic no conseguía una victoria delante de los suyos y porque la situación a la clasificación empezaba a ser más que preocupante.

Un 3-0 que exactamente pudo ser un 4-0 o, incluso, un 5-0. No fue un partido brillante con respecto al juego del Nàstic, pero dos cosas quedaron claras sobre el césped: el Nàstic ha recuperado el olfato goleador, y el Lugo no se llevó ningún premio porque no disparó entre los tres palos. Dominio gallego, estéril y sin incidencia en las jugadas clave. Así se ganan los partidos.

Maikel Mesa abrió el marcador gracias a un gran remate de cabeza a centro de Álvaro Vázquez, continuó la fiesta Muñiz con un golazo con pierna derecha a pase de Jean Luc, y acabó de estallar la traca Tete Morente culminando un contraataque en el 95’. El mismo Morente, que hizo un partido de bandera, pudo marcar un gol más después de quedarse sol ante el meta rival y ver cómo le desviaban el chute y Álvaro, en el primer acto, disparó al exterior de la red.

Pudieron ser más, pero el Nàstic se tuvo que «conformar» con un 3-0 que deja muchos recuerdos. El primero, que hacía seis meses y medio que el Nou Estadi no veía tres goles. Eso sí, tres, del equipo local, ya que algún equipo foráneo, desde entonces, sí que ha marcado por triplicado. El último recuerdo en Tarragona donde el Gimnàstic anotó tres dianas fue el del 17 de septiembre del 2017, cuando los locales, en el estreno de Rodri en el banquillo, vencieron 3-1 al Albacete después de la destitución de Lluís Carreras como técnico grana.

Pero todavía hay que echar más atrás en el tiempo para poder asistir a un partido en el cual el Nàstic, ante su propia afición, haya ganado por tres goles de diferencia. Fue el 14 de abril del 2017, en la visita del Mirandés al Nou Estadi. Los de Miranda de Ebro, que posteriormente descendieron, fueron el último equipo que se ha marchado goleado de un Nou Estadi que, después de lo que se vio el sábado, queda claro que se ha reconciliado completamente con el equipo.

Pero la Liga no se detiene, y ahora llega otro objetivo, que no es otro que el Valladolid. Los castellanos visitarán el Nou Estadi este domingo, a partir de las doce del mediodía. Con 39 puntos, los tarraconenses se han distanciado en seis de la zona de descenso y, si sumara tres más, en el segundo partido consecutivo en casa, se acercaría mucho al objetivo de la permanencia. El Valladolid, por su parte, no lo pondrá fácil, ya que es séptimo, y tiene la promoción de ascenso a sólo un punto.