La plantilla reusense gana equilibrio entre veternia y juventud

La dirección deportiva del CF Reus cerrará, con toda seguridad, la mejor plantilla de la cual ha dispuesto el club en la Segunda División. El tercer verano de los roig-i-negres en el mercado ha servido para constatar el crecimiento de la entidad, que ha sabido como moverse para incorporar jugadores que permitan dar un salto de calidad al equipo. Lo ha hecho, además, sin que suponga una gran inversión y atando las piezas a largo plazo. De momento, sólo se ha cerrado una cesión, a la espera de que Mikel Villanueva también llegue en formato de préstamo desde el Málaga.

La plantilla todavía necesita algún retoque, y sólo tiene la urgencia del lateral izquierdo. El resto de movimientos en el mercado dependen de decisiones de futbolistas en concreto. Además de Yoda, que mantiene a la espera la incorporación de un extremo, se encuentra Isaac Cuenca. El reusense pidió al club roig-i-negre un margen para poder decidir sobre su futuro. Si transcurrido este tiempo Cuenca no encuentra ninguna aventura en el fútbol profesional, la posibilidad de que vista de roig-i-negre a partir del 18 de agosto se puede convertir en realidad.

Más allá de los aspectos a pulir, Xavi Bartolo ya tiene casi todas las piezas a su disposición. Actualmente cuenta con 19 futbolistas, a los cuales se puede ampliar a un máximo de 23 jugadores si se contemplan las incorporaciones de un central, los dos extremos (sean Cuenca i Yoda u otros) y un delantero. Esta cifra contrasta con la de otras temporadas. El año del debut al fútbol de plata, Natxo González contó con 27 piezas a lo largo del curso, y la campaña pasada Artiz López Garai contó con un total de 26 futbolistas.

Esta rebaja en efectivos también se ha traducido en incorporaciones de prestigio. El ejemplo más claro es el de Miguel Linares, un delantero contrastado con gol de sobra en sus piernas. Siguiendo este perfil también ha llegado Mario Ortiz, futbolista con una larga trayectoria al fútbol profesional español. Estos dos futbolistas, precisamente, han sido los fichajes de más edad que ha cerrado el club, con 35 y 29 años respectivamente. Tanto Linares como Ortiz, además, refuerzan dos zonas donde la experiencia y la veterania juegan un punto a favor.

Un espacio donde estallar

El CF Reus ha sabido rodearse a partes iguales de experiencia y juventud. Este guion se ha constatado en el actual mercado de verano, en el cual han llegado jugadores contrastados y otros con mucho margen para crecer. Es el caso de Shaq Moore (21 años), Alejandro Catena (23 años) o Adri Guerrero (20 años), quien ha subido del filial. También se han incorporado futbolistas con más años de trayectoria pero con el mismo perfil de juventud con capacidad para reventar en un club que también busca crecer y hacerse fuerte.

Así, la media de edad de la actual plantilla es de 27 años, la más joven de las últimas temporadas y la que mejor combina juventud y experiencia con menos piezas sobre el terreno de juego.

El caso de Adri Guerrero abre una puerta al uso del filial como plataforma para dar el salto al fútbol profesional. El curso pasado ya se hizo un experimento similar cuando Antonio Sillero subió al primer equipo para suplir la baja de Santamaría. El movimiento del lateral izquierdo, sin embargo, no responde a la necesidad, si bien es cierto que es el único futbolista en esta demarcación. Algunas de las incorporaciones del Reus B Cambrils también se han hecho pensando en la posibilidad de que, en una o dos temporadas, puedan hacer el salto en el primer equipo. Con menos efectivos, Bartolo puede acudir con más facilidad al plantel.