Cuenca tiene que decidir ya si se queda en Reus o se marcha a jugar al extranjero
El club espera la decisión del extremo, que podría anunciarse esta misma semana, la anterior a la del inicio de la Liga
Isaac Cuenca: o quedarse en casa y firmar por el CF Reus o marcharse al extranjero. O conseguir la estabilidad que pedía y poder estar cerca de su familia, o iniciar una aventura de aquellas que se sabe como empiezan y nunca cómo acaban. Ahora bien, quedarse en casa o marcharse fuera también tiene como consecuencia tener una ficha más ajustada o mucho más elevada. Hace falta ponerlo todo en la balanza y decidir, pero hacerlo pronto.
El CF Reus está teniendo toda la paciencia del mundo con Isaac Cuenca, un futbolista que empezó la pretemporada con la entidad de la capital del Baix Camp, pero que todavía no ha decidido su futuro. Él, que nunca ha ofrecido ninguna falsa esperanza, siempre ha comentado que no sería descartable quedarse en el club de su infancia, el que lo ayudó a dar el gran paso al Barça y que le allanó el camino de la profesionalidad. Cuenca tendría que decir esta semana si firma o acepta otra oferta.
La idea inicial de Cuenca en su llegada a Reus era sencilla: entrenar a pocos metros de su casa a la espera de una buena oferta de un equipo español. Si podía ser de Primera División, mejor y, si venía uno Segunda División A con un buen proyecto, también le abriría las puertas. Ahora bien, las deseadas propuestas del fútbol nacional no le han llegado a este extremo derechista que podría ser una de las grandes bombas de la Segunda División A del verano.
Este jugador le ofrecería al Reus todavía más desequilibrio del que tiene actualmente por las bandas. El recientemente renovado Karim Yoda, Ricardo Vaz, Fran Carbia o David Querol ya son suficientes argumentos para dejar las bandas tal y como están en la entidad reusense, pero un quinto jugador ofrecería todavía más competencia y un plus de calidad que equipararía la delantera del CF Reus a una de las mejores de la categoría de plata del fútbol español. Eso, gracias, también, al hecho de que Miguel Linares y Lekic son los «9» del equipo que entrena a Xavi Bartolo.
Cuenca tiene 27 años y empezó su carrera amateur en el Sabadell, a Segunda División B, donde se marchó cedido procedente del Barça. Después, jugó seis partidos al filial azulgrana en una temporada 2011-12 en la cual debutó con el primer equipo, jugó dieciséis enfrentamientos con el cual, once de ellos como titular, y en los cuales anotó dos goles. Con el primer equipo, ganó la Copa del Rey, la Supercopa de España, la Supercopa de Europa y el Mundial de Clubs, cuatro títulos en la temporada en la cual participó fuerza al equipo de la Ciudad Condal. No tuvo la suerte deseada, y se marchó al Deportivo de la Corunya donde, a pesar de sus 27 enfrentamientos, no siguió. Dos temporadas más en la Granada, antes de marcharse al Hapoel Beer Sheva de Israel, donde se proclamó campeón de Liga, pero no continuó a pesar de tener contrato hasta el 2020.