Diari Més

Máximo castigo en el estreno (1-1)

El Nàstic ve cómo el Tenerife le empata en el minuto 93 en una acción polémica con posible falta de Nano Mesa en el gol de Aveldaño

Javi Márquez, contra el Cádiz.

Javi Márquez vuelve para conquistar el Nuevo Los CármenesNàstic

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La crueldad del fútbol llega al Nou Estadi en las primeras de cambio. Un Nàstic que tenía los tres puntos en el bolsillo después de una gran primera mitad vio como el Tenerife, que fue de menos además, se llevaba un punto con uno en el minuto 93 de partido.

Una diana cargada de polémica, con posible falta de Nano Mesa, condenó al Nàstic de Tarragona a un empate muy cruel. Aveldaño aprovechó una buena centrada desde la izquierda, que se generó después de un despiste en una entrega de Omar Perdomo. Bernabé, que había cuajado un duelo excelente hasta entonces, dudó a la hora de salir y el resultado fue el gol del central de los canarios, que se marchaban llenos de moral después de llevarse un punto en un duelo que veían perdido.

El primer Nàstic de la temporada que dibujó a José Antonio Gordillo fue bastante diferente a lo que decían muchas quinielas. Sobre todo, del centro del campo en hacia atrás, ya que el hecho de que jugarían Javi Márquez y Rocha en el centro del campo, Tete Morente y Coris en las bandas y Uche y Manu Barreiro estaba más o menos previsto.

Si todo hacía indicar, porque ha sido uno de los fichajes estrella de la temporada, que Isaac Becerra sería titular, no acabó siendo así. Bernabé Barragán, uno de los mejores futbolistas de la pretemporada del Nàstic, fue el escogido por Gordillo para ser el primero en defender los palos del club tarraconense.

También había dudas en los laterales porque Otar Kakabadze y Abrahám Minero sufrían molestias, más graves las de este segundo. Las pudieron superar, y fueron de la partida. También era previsible, para|por el bajo estado de forma de Djetei y de César Arzo, que Fali fuera uno de los dos centrales. Pero entre el africano y el valenciano tenía que salir el otro, al menos para la opinión de muchos, los cuales se sorprendieron por la alineación de Mejías, al cual acabaron aplaudiendo a causa del buen partido realizado por el futbolista cedido por el Leganés.

El Tenerife salió muy dormido, como si todavía continuara de pretemporada. De hecho, se nota que físicamente los jugadores todavía no están a tono, porque fue constante ver en el césped futbolistas que no llegaban a tiempo a pelotas que parecían sencillas.

Quien lo hace todo fácil es Uche. Cuando este jugador está enchufado y en forma hay pocos que lo puedan parar. Hasta tres ocasiones claras a la primera mitad para el africano, el cual disparó, a los tres minutos de juego, probando Dani Hernández. El meta envió a córner el chute con pierna izquierda desde la frontal. En el córner de la misma jugada, Uche remataba de cabeza, pero el meta visitante paraba sin problemas.

Eran dos avisos de lo que tenía que llegar. El Nàstic combinaba bien. Se gustaba y gustaba. La diana estaba en el horno, y la acabó de cocer Fali. El centrocampista, jugando de central, entró con todo en un córner botado por Rocha desde la izquierda de la portería rival. Gol que hacía enloquecer un Nuevo Estadio necesitado de amor, lo que le profiere uno de sus ídolos. Ídolo en el cual también se convertirá Uche si continúa a este nivel. Estuvo a punto de marcar el segundo, en el 32,’ pero envió al palo una gran pasada de Barreiro que se trabajó el gallego después de una buena acción por la banda|lado izquierda.

No sólo Fali fue héroe en el Nàstic, sino que bajo palos también hubo uno, y de bien destacable, excepto la desgraciada acción que supuso el empate. El partido en conjunto que cuajó el meta fue para enmarcar, pero el paro que protagonizó en el minuto 43 fue realmente estratosférico. De otro mundo. Centrada desde la izquierda, se eleva Crío Mesa a quien, de cabeza, la remata allí donde cree que nadie puede llegar. Nadie excepto Bernabé, que voló literalmente para desviar el peligro.

Una gran bajada

El Tenerife entendió que no podía seguir jugando así si quería sumar alguna cosa positiva de Tarragona. Salió mucho más enchufado a la segunda mitad y cogió un impulso mayor con el ingreso al campo de José Naranjo. El ex del Nàstic fue el jugador más peligroso de los suyos a pesar de ser de los que menos jugó. Hizo más carreras que nadie, tiró una falta peligrosa y, cerca del minuto 70, disfrutó de un uno contra uno con Bernabé que solucionó a la perfección el meta del Nàstic, que estuvo un par de minutos extendido al césped, al hacerse daño en la mencionada acción.

Diez minutos antes a los cuales Naranjo asustara, podría haber sentenciado el Nàstic. Nuevamente, en una acción de córner en la cual esta vez remató Barreiro y, cuando la pelota entraba, Uche la tocó, estando en posición de fuera de juego.

Entra Omar

También sorprendente el primer cambio propuesto por Gordillo, ya que fue Omar Perdomo el que ingresó en el terreno de juego. En principio, el técnico no contaba con el canario, pero este jugó media hora contra su exequipo. No imprimió lo que quería al entrenador, así como tampoco lo consiguió Manu del Moral, segundo cambio de Gordillo. El tercero fue Luis Suárez, cuando el duelo estaba para intentar mantener la ventaja. No fue culpa de los cambios ni de los jugadores que salieron desde el banquillo, pero el cierto es que el empate hace mucho daño.

FICHA TÉCNICA

Nàstic. Bernabé, Kakabadze, Mejías, Fali, Abrahám Minero, David Rocha, Javi Márquez, Sebas Coris (Omar Perdomo, 61), Uche (Manu del Moral, 76’), Manu Barreiro y Tete Morente (Luis Suárez, 92).

Tenerife. Dani Hernández, Luis Pérez, Aveldaño, Carlos Ruiz, Camille, Bryan Acosta (José Naranjo, 57), Alberto, Luis Milla, Suso (Borja, 71), Nano y Malbasic (Chilunda, 85).

Goles. 1-0, Fali (10); 1-1, Aveldaño (93).

Árbitro. Saul Ais Reig (Valenciano). Mostró la tarjeta amarilla a los locales Fali, Abrahám Minero, David Rocha, y Mejías; y a los visitantes Camille y Crío Mesa.

Incidencias. El Nuevo Estadio acogió a 5.483 espectadores.

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