Este es el camino para crecer
El Nàstic completa un buen duelo que acaba con empate y con notables sensaciones a pesar de las nueve bajas que sufría José Antonio Gordillo
El Gimnàstic de Tarragona se marchó del Ramón de Carranza con un punto y con la sensación que podía haber acabado sumando tres puntos. Tres puntos que se podrían haber marchado a Tarragona si el colegiado no hubiera señalado un penalti a favor del Cádiz que no era pena máxima y que también podrían haber venido hacia casa si el colegiado hubiera subido al marcador un gol legal de Luís Suárez que acabó anulando. Todo es negro para un Nàstic que, con un poco de suerte y de justicia, habría sumado tres puntos que, para muchos, este domingo fueron merecidos.
Los tarraconenses se presentaban al duelo con hasta nueve bajas, una situación que no ponía nada favorable la situación de un equipo que se lo jugaba casi teniendo en cuenta su situación clasificatoria. El Nàstic, con cinco bajas defiende, tenía que competir con un Cádiz que, aunque llegaba al duelo con una retaguardia en cuadro, tenía argumentos para marcharse del partido con los tres puntos.
Roger Figueras volvió a ser el escogido para jugar en el lateral derecho del Nàstic, en una defensa donde Cadamuro, Djetei y Abrahám eran los que la completaban. Rocha y Fali, con las bajas de Ramiro Guerra y de Javi Márquez, eran los escogidos. En frente, Sebas Coris por la derecha, Tete Morente por la izquierda y Uche y Luis Suárez arriba. Mientras tanto, Manu Barreiro, capitán y fuselaje insignia del equipo, tenía que esperar su oportunidad desde el banquillo.
Jugar a Ramón de Carranza se le puede hacer largo en cualquiera. Aunque el Cádiz afrontara el duelo con una gran cantidad de bajas, resultaba un enfrentamiento más que complicado a un Nàstic que llegaba en cuadro, pero consciente de que las excusas tenían que brillar por su ausencia.
Durante la primera mitad, treinta minutos fueron para los andaluces, mientras que el resto tuvo como dominador un Nàstic que demostró, en muchos momentos, una ambición digna de aquellos que no se quieren rendir en ningún momento.
Los andaluces, como era de prever, quisieron llevar el peso del enfrentamiento desde el principio. Ahora bien, se encontraron con una defensa más que ordenada y equilibrada que no le permitió hacer lo que quiso.
La mala suerte y el mal comportamiento arbitral volvieron a chocar con el Nàstic. El colegiado señaló una supuesta falta dentro del área de Djetei que nunca llegó a existir. El futbolista del Nàstic se apoyó sobre un rival y en ningún momento cometió penal, pero el colegiado señaló la pena máxima. Álex Fernández la transformó y el partido se convirtió en aquello que el Nastic no quería: un intento de remontamiento.
Ahora bien, los tarraconenses, bien posicionados sobre el césped, insistieron en su idea, la cual tuvo resultado cuándo, en el 33’, Sebas Coris asistió para que Luis Suárez, solo, subiera el empate. Fue una acción en la cual el punta del Nàstic, sin contemplaciones, latió|batió a Cifuentes en una acción que dio paso al descanso.
Sin miramientos
El Nàstic no tuvo ningún miedo a ir a por la victoria. Los tarraconenses plantaron cara en todo momento al rival durante los segundos 45 minutos. No hubo diferencias entre los dos conjuntos después del descanso, ya que ambos fueron a por el triunfo, sin que los de José Antonio Gordillo disfrutaran de la suerte necesaria como para dominar.
El Nàstic plantó toda la cara posible en el segundo acto delante de un Cádiz que, por entidad y, sobre todo, por presupuesto, habría podido demostrar alguna cosa más ante un equipo que hizo todo lo posible y más para llevarse los tres puntos.
De hecho, la última media hora fue tarraconense. Los de José Antonio Gordillo, sin disfrutar de una posesión clara, mantuvieron a raya al rival y, de paso, demostraron que, a pesar de tener un 40% de la plantilla disponible, pueden plantar cara a cualquiera.
Las bandas del Cádiz, en muchas ocasiones, fueron temibles, pero no tanto como en anteriores ocasiones. Sebas Coris, que fue de menos además, intentó llevar peligro desde la banda derecha, igual que lo probó Tete Morente. Ninguno de los dos extremos, ni Omar Perdomo cuando entró, fue suficientemente peligroso como para agujerear la portería visitante.
Debuta Salva Ferrer
Faltaban cinco minutos para la finalización del enfrentamiento cuando José Antonio Gordillo decidió dar entrada a Salva Ferrer. El joven central del filial CF Pobla de Mafumet ingresaba en el terreno de juego en vez de Roger Figueras. Eso significaba que el futbolista debutaba con el Nàstic, aunque lo hacía en una posición que no era el suyo habitual. Ës central, pero se estrenaba a Segunda División A como lateral derecho. Cinco minutos más el descuentos tuvo un futbolista que, por|para lo que ha demostrado al filial, puede tener un futuro muy prometedor con el Nàstic. Eso sí, si alguien cuenta con él. Al final, un punto para cada uno y un partido que acaba con ninguno de los dos partidos sin acabar de estar contento del todo.
FICHA TÉCNICA
Cádiz. Cifuentes, Rober, Edu Ramos, Kekojevic, Mateos, Álex, José Mari, Salvador Agra (Salvi, 58’), Aketxe (Mario Barco, 73’), Vallejo (Jairo, 58’) y Lekic.
Nàstic. Becerra, Roger Figueras (Salva Ferrer, 85’), Djetei, Cadamuro, Abrahám Minero, David Rocha, Fali, Sebas Coris (Omar Perdomo, 78’), Uche, Luis Suárez (Manu Barreiro, 73’) y Tete Morente.
Goles. 1-0, Álex Fernández de penal (16’); 1-1, Luis Suárez (33’).
Árbitro. Saúl Ais Reig (valenciano). Mostró la tarjeta amarilla a los locales Djetei, Roger Figueras, Uche y Omar Perdomo.
Incidencias. El Ramón de Carranza acogió a 12.450 espectadores.