Motor
Ogier se proclama vencedor en un accidentado 'Shakedown' en Salou
Thierrey Neuville volcó y sólo pudo hacer una pasada de las cuatro que están permitidas
Sébastien Ogier empieza pisando fuerte. El francés, junto a su copiloto, Julien Ingrassia, fue el más rápido de todos los que tomaron parte en el Shakedown o tramo de pruebas de la 54ª edición del RallyRACC Cataluña-Costa Daurada.
Miles de personas se acercaron a la zona de Ejidos de Salou para poder seguir de cerca la competición más espectacular del mundo sobre cuatro ruedas. La combinación de asfalto y tierra hace todavía más espectacular una cita, que, ayer, arrancó bastante accidentada. Y es que el Hyundai i20 Coupé de Thierry Neuville y Nicoras Gilsoul volcó y sólo pudo hacer una de las cuatro vueltas permitidas. Aunque el coche no tenía demasiados daños, tuvo que ser retirado por un vehículo de rescate, ya que no estaba en condiciones de continuar el camino.
Ogier-Ingrassia, con su Ford Fiesta WRD, consiguieron completar el recorrido en un tiempo de 1'34''9. A continuación, pasaron por la meta Jari-Matti Latvala/Mikka Anttila (Toyota Yaris WRC), con un tiempo de 1'35''2. Completó el podio de honor Teemu Sunninen, al lado de su copiloto, Mikko Markkula, en el volante del Ford Fiesta WRC, con 1'35''7.
Todos los equipos de Prioridad 1 realizaron tres pasadas exceptuando al ya citado Thierry Neuville, a causa de su accidente. Aparte, hicieron el especial en cuatro ocasiones a Ott Tänak/Martin Järveoja (Toyota Yaris WRC) y Khalid Al Qassimi/Chris Patterson (Citroën C3 WRC). Acto seguido, pasaron por el Shakedown los equipos prioritarios 2 y 3.
Mientras que en la capital de la Costa Daurada el RallyRACC hizo acto de presencia durante la mañana, por la tarde la prueba se trasladó a Barcelona. Era el día del retorno al tramo urbano de la Ciudad Condal, que el año pasado se perdió pero que ha vuelto con más fuerza que nunca y con un espectacular seguimiento por parte de los enfermos del motor.
La caravana de participantes salió a la una y cuarto del mediodía de Salou para que, pasados ocho minutos de las seis de la tarde, los pilotos iniciaran una especial que estuvo precedida de varios actos de promoción protagonizados por los propios pilotos.
El más rápido en el tramo barcelonés fue también Sébastien Ogier, con un tiempo de 3'35''3. Neuville, ya recuperado del accidente de la mañana, lo siguió acabando segundo (3'39). Por detrás llegaba Ott Tänak con un tiempo de 3'39''5. El mejor piloto nacional fue Dani Sordo, quien consiguió la sexta plaza tanto en el especial de Barcelona como en la clasificación general.
Empieza la carrera de verdad
La acción de verdad empieza mañana, con una etapa mixta con mucha dureza. El tramo Terra Alta se realizará en sentido inverso en el habitual en los últimos años y pasa llamarse La Fatarella-Vilalba, con 35 kilómetros que centrarán la máxima emoción de la prueba.
De cara al sábado, hay que destacar que la carrera se realizará íntegramente por asfalto y destacan los tramos Querol, El Montlmell y Savalà, especiales que se disputarán dos veces a cada una. Finalmente, domingo, Riudecanyes y Santa Marina para, a las dos del mediodía, el esperado podio de honor.