El Nàstic quiere agujerear un muro hasta ahora infranqueable
Los tarraconenses visitan a un Málaga (16 horas) que lo ha ganado todo en La Rosaleda
El Nàstic visita esta tarde a las 16 horas a un Málaga que ha ganado todos los partidos que ha disputado este año en La Rosaleda y que llega al duelo como gran favorito. Es así porque los andaluces están a un punto del ascenso directo en Primera y porque, por plantilla y por presupuesto, son candidatos firmes al ascenso a Primera.
Los tarraconenses son colistas y llegan después de ofrecer una pésima imagen en los dos últimos partidos disputados, que han desembocado en dos derrotas, contra el Albacete (2-0) y el Zaragoza (1-3). Todo el mundo sabe que puntuar en La Rosaleda es una misión más que complicada para el Nàstic, pero la necesidad está, y es muy grande.
Los andaluces recuperan a cuatro sancionados, como son los centrocampistas Adrián González, el senegalés Alfred N'Diaye y Javi Ontiveros y el defensa uruguayo Federico Ricca.
El portero Munir no podrá jugar al estar convocado con la selección marroquí y lo volverá a suplir Kieszek. Por lesión, no jugarán los defensas Juankar y Luis Hernández y el centrocampista Álex Mula.
Sin Córiones
Por parte del Nàstic, Sebas Coris no se ha podido recuperar de las molestias que arrastraba, y se une a las bajas ya conocidas de Arzo, Iván López, Ramiro Guerra, Fali y Uche. Así, Enrique Martín tendrá que recomponer la defensa y buscar a un carrilero derecho, que podría ser o bien Abrahám o Javi Jiménez, que actuarían a pierna cambiada, o un extremo que retrasara su posición, como Brugui, Omar Perdomo o Tete Morente.
Con Becerra en la portería, Tete podría ser el escogido para jugar como lateral, mientras que en el otro carril Abrahám Minero y Javi Jiménez se disputarán el sitio. El primero acaba de salir de una lesión y esta circunstancia podría condicionar la decisión de Martín. En el eje de la defensa, podrían repetir Mohammed Djetei, Josua Mejías y Raúl Albentosa.
En el centro del campo, sin Fali podrían repetir Javi Márquez, David Rocha y Brugui, con Manu del Moral y Luis Suárez en la punta de ataque.