Joan Oliver se reunirá hoy con los jugadores para darles explicaciones

Continúa el serial en Reus. Ayer, vuelta a los entrenamientos del CF Reus después de dos días de fiesta y continúa el serial del cobro de las nóminas. La novedad era que los dos futbolistas que se acogieron al proceso abreviado y que no habían cobrado, ya pudieron recibir en su cuenta bancaria las tres nóminas pendientes, correspondientes a los meses de septiembre, octubre y noviembre. El resto de jugadores, que interpusieron la denuncia por su parte en los juzgados, no han visto ni un euro.

Aparte, los futbolistas conocieron que hoy el propietario del club, Joan Oliver, se reunirá con ellos en un encuentro que, presumiblemente, será tenso, ya que la situación es preocupante. Posiblemente antes del entrenamiento, el máximo accionista de la Sociedad Anónima Deportiva protagonizará un encuentro con los jugadores a los cuales dejó de pagarles durante más de tres meses y que, después del anuncio del sábado realizado por el club que ya había pagado, todavía hay algunos que no han cobrado nada del prometido. Se les añaden el entrenador, Xavi Bartolo, el cuerpo técnico y los trabajadores de la entidad, que se han levantado cada mañana para ir a trabajar sabedores que no cobraban para hacerlo.

Son muchas las dudas que pasan por la cabeza de los jugadores. El primero, el más claro, es por qué únicamente han cobrado los doce mencionados. Quieren saber si ha sido sólo para parar el golpe o si hay otras intenciones. Aparte, tienen «curiosidad» por conocer de dónde proviene este dinero y, en el caso que los convenza la respuesta, si habrá suficientes para cubrir los compromisos hasta finales de temporada.

Como era de esperar, las caras de los jugadores durante la sesión en el Estadi Municipal fueron muy largas. Los futbolistas ya preveían que esta situación se podría producir. El club pagó las nóminas a los doce futbolistas que podían quedar libres según la reglamentación vigente si no cobraban sus nóminas, futbolistas que, amparados por LaLiga, habrían acabado cobrando igualament toda esta temporada, el 50% de la siguiente si hubieran tenido contrato y el 25% de una posterior.

La solidaridad de los unos con los otros ha motivado que los futbolistas sigan yendo a una y que sigan muy enfadados con un club de lo que piensan que los ha engañado, los sigue engañando y que, en un futuro, lo podría seguir haciendo. Tanto los jugadores que sí han percibido sus nóminas como aquellos que todavía no han visto ningún movimiento reciente en su cuenta bancaria tienen el pensamiento que seguir jugando a Reus comporta unos riesgos y jugadores de ambos lados continúan adelante con la idea de abandonar el club de la capital del Baix Camp durante este mercado de invierno.

El sentir del club es que en los próximos días irán cobrando los jugadores denunciantes por la vía judicial, el entrenador y el cuerpo técnico, y los trabajadores, en este mismo orden. Las sensaciones, a nivel de club, son diferentes a las de los futbolistas, un poco más optimistas.

Pero la gran diferencia es que, seguramente, el cien por cien de estos jugadores tendría otro destino de forma inmediata, mientras que en el cuerpo técnico y, sobre todo, a los trabajadores, los costaría mucho más encontrar una salida profesional que los ayudara a salir adelante con sus vidas.