Joan Oliver: «La denuncia de los jugadores ha agravado la situación»
El dirigente rojinegro ha repasado el mal momento económico que atraviesa el club
El máximo accionista del Reus, Joan Oliver, ha llegado al Estadio regañado por un grupo de aficionados que no aguantan más la situación por la cual está pasando el CF Reus Deportiu. Oliver ha repasado con la prensa todos los hechos que han llevado al club rojinegro hasta el precipicio, aunque la continuidad del club está garantizada, tal como apunta al máximo accionista del club.
Joan Oliver ha expresado que entiende la decisión de los jugadores pero critica que eso «ha agravado la situación». «Seis jugadores hicieron una demanda que no procedía por motivos técnicos. A partir de aquí, los dos objetivos que tengo para el club se complican mucho», explica Olivé, que detalla: «el primero de ellos es la venta del club, que todavía tenemos negociaciones abiertas; y el segundo es conseguir la permanencia en Segunda División». Oliver ha argumentado que la oferta de la liga (que pagaba los salarios a los jugadores) era mucho más positiva que continuar con las denuncias que nos han llevado hasta aquí. El máximo dirigente rojinegro ha querido remarcar que, aunque la cara visible del club son los jugadores del primer equipo, hay mucha más gente que está sufriendo esta situación, cerca de 200 trabajadores del club.
«El golpe de ayer es muy duro», continúa Oliver, haciendo referencia a la desvinculación de hasta cinco jugadores rojinegros que dejan muy tocada la plantilla, en cuanto a efectivos. A pesar de todo, Oliver afirma que «la continuidad del equipo en la liga está garantizada, a diferencia de hace 20 días cuándo el Reus estuvo a punto de disputar el último partido de su historia». El accionista, recuerda que necesitan tener sobre el terreno de juego un total de 7 jugadores del primer equipo, es por eso que defiende que pueden seguir compitiendo. Oliver remarcar que su deseo y su obligación son vender el club para solucionar estos problemas. El dirigente no se ha cansado de repetir que todavía tiene muchas negociaciones abiertas aunque la situación que está viviendo no ayuda. Oliver afirma que los pagos que realizaron a los jugadores fueron posibles gracias a fondos personales, tanto de él como de otras personas próximas al máximo accionista rojinegro.
«Estoy intentando vender el club desde agosto. Como podéis entender, era mucho más favorable a que se produjera una venta en verano que no ahora con todos los problemas que estamos «arrastrando», detalla Oliver y argumenta que «el club tiene una deuda de 5,2 millones de euros, eso es lo mínimo que pedimos al inversor que se quiera hacer cargo del club, a partir de aquí podemos negociar». Oliver tiene más del 90% de las acciones del club del Baix Camp pero asegura que si hace falta, regalará estas acciones, remarcando que lo importante es que quien compre el club se haga cargo de la deuda.
Preguntado sobre sí la compra del club chino tiene algo que ver con la mala situación económica que atraviesa el Reus, Oliver ha asegurado que han recibido más dinero de los qué han puesto. «Este club chino se comprometió a ir invirtiendo más dinero en el Reus, el problema llegó cuando el gobierno chino aprobó una ley que impedía a empresarios del país hacer inversiones con clubes extranjeros», observa Oliver, y añade «mi error fue no ver cómo nos afectaría a eso».
Joan Oliver ha explicado que los jugadores que quedan en el Reus tienen los derechos y deberes de cualquier trabajador, por lo tanto, si quieren salir del club en este mercado tendrán que traer una oferta beneficiaría para la entidad rojinegra que, antes de vender a cualquier jugador, se asegurará si puede sustituir su sitio con un nuevo fichaje. El máximo accionista también ha relatado que podrán llenar cuatro fichas que han quedado vacías con jugadores de un equipo dependiente, es decir, del Reus B Cambrils, por lo tanto, hasta cuatro jugadores del filial podrían pasar a tener ficha del primer equipo este invierno. Oliver ha querido acabar la rueda de prensa asegurando que luchará hasta el final para revertir la situación del club y que espera que la afición también lo haga.