El delegado de la UD Salou acusa al entrenador del Racing Bonavista de mentir
Según Guillemat, el banquillo rival insultó durante el partido al entrenador salouense
El jugador del Racing Bonavista se dirige a la aficionada de la UD Salou
El responsable de la escuela de fútbol de la UD Salou y que al mismo tiempo es el delegado del primer equipo del club, Salva Guillemat, ha salido al paso de las últimas manifestaciones del entrenador del Racing Bonavista en el conflicto que mantienen los dos equipos desde el domingo pasado.
La confrontación se originó a causa de los insultos machistas que un jugador del Racing Bonavista Soufiane Balli dirigió a personas del público y que han provocado que el club salouense anuncie una querella contra él.
Según el entrenador del equipo de Tarragona, David Serrano, el jugador reaccionó a los repetidos insultos racistas que recibió durante el partido. Serrano fue más allá, y además de afirmar que también fue insultado un jugador del equipo que vive en Salou, Rubén, se refirió como 'borrachos' a los directivos salouenses que estaban en la grada.
El director de la escuela de fútbol de la UD Salou afirma, sin embargo, que el entrenador del Bonavista no dice la verdad: «del banquillo no se escucha todo lo que se dice en la grada. Si el entrenador estuvo pendiente de eso, así le fue el resultado», refiriéndose a la derrota del Racing.
Guillemat niega que el público insultara al jugador Rubén, «es un exjugador del Salou, a quien se le quiere mucho,» y reprocha la calificación sobre si iban bebidos los directivos de la UD Salou, «porque, Sr. Serrano, todos tenemos nuestras tendencias y lados oscuros, verdad?».
Y finalmente señala que, «lo que omite el entrenador del Racing es que su ayudante, Sr. Sevilla, estuvo insultando al entrenador del Salou, Carlos Rico, durante todo el partido, llamándole 'pamplinas'.»
Como responsable del fútbol formativo, Guillemat añade también que no se les puede calificar de racistas, «cuando más del 40% de los jugadores de nuestra escuela son de diferentes culturas, raíces y religiones».
El conflicto entre los dos clubs arraiga en el duelo de ida, cuando los salouenses ganaron 5-1. Al finalizar el partido, el club de la ciudad de Tarragona impugnó el resultado, ya que su rival no contaba con ningún entrenador titulado. Según la normativa de la Federación Catalana de Fútbol (FCF), no se puede jugar en Tercera Catalana sin un técnico con el título correspondiente y, por lo tanto, el duelo se solucionó con un 0-3 a favor del Racing.
Guillemat considera que el entrenador del Racing tendría que reconocer sus errores y saber perder, porque, añade, «el pamplinas, con carné o sin, en tres partidos le ha encajado 11 goles».
"Van venir a Bonavista a dir-li moro de merda a un jugador nostre"