Pipa deja el milagro a medias (1-1)

El Nàstic se marcha de Riazor con un punto (1-1) que parece agridulce. Sobre todo, por la ocasión que falló Pipa en el último minuto del tiempo reglamentario, cuando, delante del portero rival, no fue capaz de definir como es debido y disparó desviado.

La igualada deja a los tarraconenses en una situación tan complicada como la que tenían antes de llegar a La Coruña. Las sensaciones son mejores que en los últimos enfrentamientos y el debut de Kanté fue de lo mejor que se pudo ver en el campo. Ahora bien, los resultados siguen condenando a un Nàstic que, día a día, voz como la Segunda División B es más y más cerca.

Nuevamente sorprendió Enrique Martín, que dejó aparcado el 5-3-2 para apostar por un 4-2-3-1 con muchos centrocampistas y con Luis Suárez sol en la punta de ataque. El hombre más próximo al colombiano era un Thioune que, así, veía adelantada su posición, ya que el doble pivote era para Cotán, que se estrenaba como titular, e Imanol García.

Los dos jugadores de banda eran de todo menos extremos. Si por la izquierda aparecía un centrocampista nato como Javi Márquez, en la banda contraria hacía acto de presencia un Pipa que es lateral, pero que con Enrique Martín ha jugado en más ocasiones como extremo que en su demarcación natural.

En defensa, la gran novedad era la aparición de Josema en el lateral izquierdo. Las molestias de Abrahám Minero obligaban a un cambio en esta demarcación y Enrique Martín hizo debutar al futbolista cedido por el Córdoba.

Como era de esperar, la iniciativa era local. Los de Natxo González intentaban entrar por bandas, buscando la sorpresa. A los cuatro minutos de juego, Salva Herrero tuvo que tirarse en el suelo para desviar una esférica. Dos minutos más tarde, Mikel Villanueva envió la esférica a córner para parar una llegada por el otro lado. Muy pronto se habían definido las intenciones de los dos equipos.

Diecinueve minutos tardó el Deportivo en avisar seriamente. Pérdida de pelota, una de muchas, del Nàstic en zona peligrosa. Pasaba por allí Borja Valle que, de primeras y sin pensárselo, disparó seco y raso. Bernabé, en dos tiempos, paró la esférica. Un minuto después era Fede Cartabia quien disparaba, con pierna izquierda, desde la derecha. A las nubes.

Se gallegos habían puesto a funcionar la maquinaria y ya no paraban. Aparte, si tenían en frente a un Nàstic que regalaba y regalaba, todavía mejor. Quique falló lo que no ha fallado esta temporada. Después de muchas imprecisiones del Nàstic, la pelota fue a pies del punta que, prácticamente en portería vacía, la tiró a la derecha de Bernabé.

Javi Márquez, baja

El juego era duro, sobre todo por parte de un Nàstic que tenía que demostrar agresividad si no quería poner las cosas fáciles al rival. Las cartulinas, por lo tanto, no tardaron en llegar. La primera, a los 26 minutos de juego, fue para un Javi Márquez que, al ser la quinta, se perderá el partido del próximo sábado en Tarragona contra el Cádiz por acumulación de amonestaciones. Cotán, dos minutos después, también fue amonestado. En su caso, fue la segunda de la temporada y, por lo tanto, no tendrá que sufrir en este sentido.

Llegó un momento en el cual el Nàstic hizo click y cambió la tortilla. No es que los tarraconenses pasaran a dominar. Nada más alejado de la realidad. Es más bien que el equipo de Enrique Martín le perdió el miedo al duelo y dio un paso adelante, el cual lo ayudó a acercarse a la portería rival.

Pipa, en el 31,’ inició una gran carrera en acción de contraataque que sirvió para sacar un córner, servicio de esquina que remató, muy alto Noguera. A los 38 minutos, era Javi Márquez quien disparaba desde lejos, sin problemas para el portero. Eran acciones sin peligro aparente, pero suficientes para animar en un equipo que tenía todo el peine|pinta emular las lamentables actuaciones de partidos anteriores fuera de casa.

Si Thioune hubiera tenido una pizca más de calidad, habría podido dejar completamente solo a Luis Suárez en una acción ofensiva en la cual el colombiano le marcó la pasada, pero el africano no fue capaz de verla. El descanso motivó los silbidos de un público que, nervioso, veía cómo los suyos no eran capaces de ganar a la Cenicienta de la categoría.

El gol

El Deportivo salió a por todas en la segunda mitad. Fue toda una declaración de intenciones que encontró su premio muy pronto. En el 49’, Borja Valle recibía dentro del área una esférica. Le dio tiempo a girarse y, con pierna izquierda, dirigir un cañonazo que, después de tocar en la mano de Bernabé, rozó la madera y entró.

Si era complicado el partido con el empate a cero, todavía lo resultaba más con el marcador en contra. El mismo Bernabé, que casi evita el primer gol, obró el milagro un par de minutos después. Quique condujo un contraataque que finalizó él mismo, pero su tiro se encontró con la pierna del portero del Nàstic. Instantes después, Fede Cartabia, solo dentro del área, dirigía un misil que el meta grana pudo desviar. En segunda instancia, Quique, de cabeza, la envió por encima del travesaño.

Debuta Kanté

No le gustaba lo que estaba viendo a Enrique Martín, el cual decidió mover banquillo e hizo debutar a Kanté. Entró por Cotán en un cambio netamente ofensivo. El punta barcelonés se aliaba, pues, con Luis Suárez, para intentar buscar más sorpresa arriba.

Minutos después entraba Berat Sadik al campo, cuando faltaban 25 para la finalización del duelo. El punta se colocaba arriba, con Luis Suárez, y Kanté pasaba a partir de banda izquierda. Sin casi tiempo para respirar, y cuando todavía faltaban 21 minutos para finalizar el duelo, entró Pol Valentín en el campo. Lo hizo para|por Josema, con que Pol pasó en el lateral derecho y Salva se cambió la izquierda. No quedaban más cambios.

Las nuevas caras dieron alas a un equipo que tenía que atacar fuera como fuera. Lo hacía, pero sin el orden adecuado. Sin embargo, sí que tenía el empuje necesario para, al menos soñar con el gol que le diera el empate. Sobre todo, se notó la entrada de un Kanté que las luchaba todas y que no daba ninguna pelota por perdida. En el 74’, incluso, se atrevió con un chute mientras caía al suelo.

Locura con el gol

El Deportivo buscaba el segundo. Salva Ferrer, en el 82,’ se tenía que tirar al suelo para impedir que una pelota entrara después de un gran contraataque sin embargo, cosas del fútbol, quien marcó fue el Nàstic. Pelota que recoge a Luis Suárez, se interna en el área, dispara con pierna izquierda y, con la ayuda de un central, entra a la portería.

El Deportivo, en la acción siguiente, tuvo el triunfo en sus botas, pero un tiro de un futbolista local desde dentro del área, chocó con el travesaño. También tuvo el gol al final el Nàstic. Lo que falló Pipa es imperdonable, todavía más cuando estás en la situación en la que estás. Fue un contraataque claro, tres contra dos. Luis Suárez, Thioune y Pipa contra dos defensores. El primero conduce el contraataque, la paso hacia el segundo, este asiste el tercero dejándolo solo ante|delante de el portero pero Pipa, incomprensiblemente, el tendel desviado a la izquierda del meta.

FICHA TÉCNICA

DEPORTIVO

Dani Giménez, David Simón, Michele Somma, Pablo Marí, Saúl García, Álex Bergantiños, Edu Expósito, Didier Moreno (Diego Caballo, 83), Fede Cartabia (Jonathan, 65), Quique González (Christian Santos, 71) y Borja Valle.

NÀSTIC

Bernabé Barragán, Salva Ferrer, Noguera, Mikel Villanueva, Josema, Imanol García, Cotán (Kanté, 56), Pipa, Thioune, Javi Márquez (Berat Sadik, 65) y Luis Suárez.

GOLES

1-0, Edu Expósito (49); 1-1, Luis Suárez (84).

ÁRBITRO

César Soto Grado (castellano-manchego). Mostró la tarjeta amarilla a los visitantes Javi Márquez, Cotán y Thioune.

INCIDENCIAS

Riazor acogió a 17.102 espectadores. Antes de empezar el partido, se guardó un minuto de silencio para|por Fefé García del Río, socio número 2 del Deportivo de la Coruña.