Los jugadores del Reus B estallan y denuncian al club vía AFE
Siguen sin percibir las nóminas prometidas y tienen hasta el viernes para poder reclamar lo que se les debe
El Reus B finalmente jugará el domingo en Figueres por miedo a represalias
Los jugadores del Reus B han dicho «basta». Bastantes mentiras, bastantes incumplimientos y bastante promesas que no van a ningún sitio y que día a día lo único que hacen es engordar un malestar que nunca se ha trasladado al campo, pero que lleva tiempo afectando en el día a día del cuerpo técnico y de los futbolistas de un equipo que ha realizado una temporada espectacular, acabando séptimo del grupo quinto de Tercera División.
Los jugadores han decidido denunciar al club mediante la Asociación de Futbolistas Españoles (AFE), que se ha puesto de su lado y que les ha prestado su apoyo en estos momentos tan complicados.
No estamos hablando ni de uno ni de dos meses de impagos, sino que las falsas promesas arraigan de principios de temporada, cuando Joan Oliver ya incumplió con todo el mundo, hecho que se ha hecho extensivo desde la llegada de Clifton Onolfo, este mes de enero.
De momento, los futbolistas van denunciando al club y no está claro si serán todos los que lo harán, pero el grueso de la plantilla está de acuerdo con llevar esta situación al límite, ya que entienden que se les está engañando desde el principio.
Han esperado que acabe la temporada para poner en marcha toda la maquinaria legal. Los futbolistas tenían claro que lo primero era defender la camiseta reusense por la afición, por los colores del club, por los compañeros y por ellos mismos. Pero ahora, con la exitosa temporada finalizada, ya no hay motivos para dejar de lado una realidad muy cruel.
Los futbolistas que lo deseen tienen hasta este viernes para poder denunciar a la entidad vía AFE. Los que no lo hagan, no estarán amparados por la Asociación y tendrán que ir por su cuenta, con el riesgo que esta situación comporta.
Una vez recibidas las denuncias, AFE las analizará minuciosamente y realizará la reclamación en el club por la cantidad que crea conveniente. A partir de aquí, el club tiene dos vías: la primera, pagar y se solucionará todo.
Si se produce esta situación, el Reus B podría competir sin ningún problema a Tercera División. Ahora bien, si no paga, la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) le retirará los derechos federativos. A Tercera División no existen los descensos por impagos, ya que no es una categoría profesional, pero privar de los derechos federativos sería parecido a una desaparición.
Habrá que ver cómo reacciona Clifton Onolfo a las denuncias, ya que parece que el propietario del Reus se está escudando en el proceso concursal para pagar o no pagar a los futbolistas. Abonó una nómina a una parte de la plantilla del filial y aquí se ha quedado su aportación económica.