Gerard Oliva despierta el interés del Nàstic

El Gimnàstic de Tarragona tiene que solucionar una de las carpetas más urgentes que tiene encima de la mesa, cómo es la de la delantera. Actualmente, el club grana tan sólo tiene a Berat Sadik en esta demarcación, un jugador con el cual no cuenta y que se tendrá que buscar una salida antes de que empiece el campeonato.

Con el que sí querrían contar en Tarragona es con Gerard Oliva, un punta de 29 años nacido en Riudecanyes que sería uno de estos dos puntas que el director deportivo, Sergi Parés, anunció que buscaba.

Oliva ha jugado esta temporada en el Cracovia Krakau en la primera aventura del punta en el extranjero. También ha pasado por Numancia, Atlético de Madrid B, Huesca, Murcia, Compostela, l'Hospitalet, Badalona, Atlético Baleares y UCAM Murcia, equipos con los cuales ha tenido diferente suerte.

En los equipos que mejor rindió fue al filial del Atlético de Madrid, donde militó dos campañas (2011-12 y 2012-13). Seis y trece goles, respectivamente, antes de marcharse a un Huesca donde jugó ocho ratos y no pudo anotar ninguna diana. Entre Murdia, Compostela y Hospitalet, estos dos últimos en la misma 2015-16, tan sólo seis goles.

Fue a la temporada 2016-17 cuando explotó el futbolista tarraconense, con la camiseta del Badalona. Marcó 18 goles en 34 enfrentamientos, unos números que le dieron billete para el Atlético Balears, con el cual jugó media temporada antes de marcharse a Murcia.

Este trotamóns del fútbol destaca por su altura. Sus 190 centímetros lo convierten en un peligro por arriba, aunque tampoco desentona con la pelota en los pies.

Oliva, de acabar llegando, se convertiría en la primera operación cristalizada a la delantera grana, después de las contrataciones fallidas de Juanto y de Fran Carbia, que han acabado en el Córdoba y en el Ibiza, respectivamente.