Maloku, Abeledo y Cuenca, pendientes de salir a punto del inicio de la Liga

Pedro Martín ha llenado de ilusión y de ganas a la afición de un Gimnàstic de Tarragona que, poco a poco, se va enganchando a un equipo que está a punto de acabar de perfilar su plantilla. El delantero ha generado muchas esperanzas, pero todavía falta una tarea, a veces, más complicada que la de los fichajes, como es la de las salidas. En este sentido, quedan tres carpetas abiertas: Elvir Maloku, Nacho Abeledo y Rodrigo Cuenca.

Desde el club grana no tienen ningún tipo de duda que conseguirán encontrarse salida a todos estos futbolistas. Es complicado, ya que tienen contrato en vigor, porque el futbolista siempre quiere conseguir, como es normal, el mejor trato, tanto en la vertiente económica como en la deportiva. El club propietario, en este caso el Nàstic, tiene que intentar perder el mínimo dinero que sea posible y, aparte, entra un tercer actor, que es el equipo en el cual acabará jugando el futbolista. Este, nunca quiere pagar un traspaso y necesita que el jugador haya cobrado el máximo posible en el club de origen para hacer el mínimo gasto que pueda. Se trata de una lucha de intereses en la cual todo el mundo quiere salir beneficiado.

Los tres casos son diferentes y, por lo tanto, el Nàstic no quiere dar ningún paso en falso. En principio, Abeledo era duda, pero parece que el Nàstic no quiere contar con él. Si se acabara quedando, no sería tampoco un gran problema para la entidad tarraconense, la cual lo contrató del Atlético Malagueño la pasada temporada con la ilusión de haber fichado una nueva estrella, pero parece que no fue así.

El jugador andaluz nunca tuvo la continuidad deseada y se marchó al Deportivo Fabril, con el cual no pudo evitar el descenso a Tercera División. Abeledo ha sido utilizado incluso de lateral izquierdo durante la pretemporada, a pesar de ser extremo, y las sensaciones no han sido negativas.

Elvir Maloku no cuenta de todas todas para Xavi Bartolo. El atacante llegó durante el verano del 2016 y nunca ha acabado de encontrar su lugar en Tarragona. Las cesiones que ha protagonizado en equipos del extranjero tampoco han sido nada productivas y, por lo tanto, el club ha decidido prescindir de sus servicios. El jugador, con un año de contrato, se marchará al extranjero para continuar con su carrera. Ahora, falta poner día y hora a su adiós.

Finalmente, aparece Rodrigo Cuenca, uno de los casos más extraños que se recuerdan en las últimas temporadas al Gimnàstic de Tarragona. Este delantero llegó el verano pasado procedente del Atlético Baleares y firmó por cuatro temporadas. En condiciones normales, un contrato tan largo significa confianza total, pero no fue así. Jugó la pasada campaña en dos equipos diferentes y tampoco cuajó. El club se lo quiere quitar del encima, pero no es tan sencillo, ya que el futbolista no tiene la intención de regalar su marcha. El Atlético Baleares se habría interesado en él pero, de momento, Cuenca sigue entrenando con la camiseta grana.