Pol Ballesteros es la chispa que brilla en un Nàstic que no acaba de arrancar
El joven extremo está siendo de los jugadores más destacados y más descarados en el decepcionante inicio de temporada de los tarraconenses
Cuesta encontrar luz en el ennegrecido inicio de temporada del Gimnàstic de Tarragona. Los puntos negativos superan los positivos después de sumar cinco de los primeros quince puntos en juego y de ganar tan sólo un enfrentamiento a los cinco disputados. Dos empates y dos derrotas completan el cuadro de estadísticas grana.
Ahora bien, hay un mínimo grupo de futbolistas que han ilusionado en este inicio de campaña, aunque sea un poco. David Goldar ha sido una agradable sorpresa, Pedro Martín está fino de cara a portería, pero si hay un futbolista que está enamorando este es Pol Ballesteros.
Este joven jugador, que era un total desconocido para la afición del Nàstic hasta hace un par de meses, tiene todas las aptitudes para convertirse en uno de los preferidos para la parroquia grana. Es descarado, siempre intenta hacer daño al rival, es rápido, es joven y, además, no se encoge ante ninguna situación.
La progresión de este jugador está siendo más que notable. Ballesteros militó la pasada temporada en el Sabadell, en Segunda División B. Disputó un total de 29 enfrentamientos, aunque en tan sólo 12 como titular. Aunque jugó 1.260 minutos, los aprovechó mucho, ya que fue capaz de marcar cinco goles.
Estos registros motivaron que la dirección deportiva del Nàstic, así como el cuerpo técnico, no dudaran ni un instante a darle la oportunidad de reivindicarse en el primer equipo del Nàstic. Después de la gran pretemporada realizada, Pol Ballesteros se confirmó (aunque ya lo era) de todas todas como jugador del primer equipo de pleno derecho.
Este jugador puede actuar por cualquiera de las dos bandas y, en las dos, es un peligro constante para las defensas rivales. Los jugadores de lado del Nàstic no están brillando precisamente desde que empezó la temporada. Pol Ballesteros es una excepción, ya que las actuaciones de Habran están siendo más que decepcionantes, Ferran Giner no está participando, Pol Prats está lesionado y Joel Marín ni siquiera ha debutado.
Este equipo todavía está en fase de rodaje, pero se agradece que Ballesteros, con tan sólo 22 años, sea capaz de aportar tanto de peligro por los lados, que está por donde habitualmente nacen gran parte de los goles. Cuatro partidos ha jugado el joven, ya que en uno no pudo participar por su expulsión en el Estadio Johan Cruyff ante el Barcelona B.