El Reus B no puede aplazar ningún partido más por peligro de quedar eliminado
Ya ha pospuesto dos enfrentamientos, que son los máximos que permite la FCF por problema de fechas
El FCF no volverá a Onolfo los 30.000 euros abonados para jugar a Tercera
El Reus Deportiu B está al límite. Al equipo rojinegro se le acaba el tiempo y este mismo fin de semana podría decir adiós a la posibilidad de competir en el grupo primero de Primera Catalana, dónde había conseguido su inscripción.
El motivo es bien sencillo. De momento, se han disputado tres jornadas del campeonato y, en ninguna de las cuales, el equipo ha participado. En la primera, se trató de una incomparecencia, por lo tanto, un 3-0 perdido y, en las otras dos, se pudo aplazar el partido. Ahora bien, no habrá un tercer aplazamiento.
El Comité de Competición de la Federación Catalana de Fútbol (FCF) es el ente encargado de designar las fechas para los partidos que se aplazan, con una peculiaridad: la FCF no contabiliza más de dos fechas libres para disputar partidos aplazados en la primera vuelta.
Como el Reus B ya ha pospuesto dos citas, no es posible que haya una tercera, al menos si la fecha la tiene que buscar la Federación Catalana. El panorama habría sido uno de bien diferente si el Reus hubiera llegado a un acuerdo con los dos equipos que decidieron aplazar los duelos. A la segunda jornada el Júpiter y, en la tercera, el Lloret, aceptaron las peticiones de la entidad que preside Clifton Onolfo, pero nunca llegaron a ningún acuerdo para fijar una nueva fecha.
Este domingo, el CF Reus Deportiu B tiene fijado en el calendario el cuarto partido de la temporada, a Mas Iglesias y contra el Rubí. Si antes de semillas Onolfo no abona los 221.000 euros pendientes con la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), no habrá enfrentamiento, ni tampoco aplazamiento posible.
En caso de que suceda todo el mencionado anteriormente, el Reus B quedaría eliminado de la competición y lo único que quedaría con vida, aparte de la Fundación del Fútbol Base, sería la Sociedad Anónima Deportiva (SAD).
Hasta que el administrador concursal no se pronuncie al respecto, no se sabrá si esta sociedad va a liquidación o continúa adelante de alguna manera, aunque la primera opción parece la única probable de todas las que hay sobre la mesa.