«Dudo de que haya una plantilla en un estado de forma mucho mejor que el nuestro ahora mismo»

—A pesar de los fichajes de invierno, usted es una de las sensaciones del equipo con estos tres goles en dos partidos.

—Cuando empecé a jugar en diciembre no me acababa de encontrar bien porque necesitaba mi proceso de coger ritmo y no encontrarme conmigo mismo. Ahora me siento bien, estoy ayudando al equipo con goles, que es el que se pide a un delantero, y espero que siga siendo así.

—Apesar de que se piden goles, en ningún momento se lo vio sufriendo para no marcar.

—Creo que el gol es una acción más de un partido. Durante un duelo no puedes estar haciendo acciones mal porque después, cuando te llegue la ocasión de gol, también la harás mal. Si estás acertado en las otras acciones del partido, al final, el gol llegará porque es una acción más, es una pasada en la red.

—Es uno de los indiscutibles, se lo esperaba?

—Al final, cuando vendes aquí, intentas pensar en lo mejor posible. Es cierto que al principio me costó, y más con el tema de la lesión que, cuando vuelves, el equipo ya está rodado. Pero, al final, siempre he creído en mí y estoy convencido de que puedo dar mucho.

—Se perdió mucha parte de la pretemporada por la lesión, confiaba en quedarse en el Nàstic?

—Cuándo llegas a la pretemporada y tienes que parar y no entrenas, te venden dudas. No entiendes exactamente qué está pasando, no acabas de arrancar y ves que no estás bien. Es un momento complicado porque ves que los otros sí que entrenan y tú no. Al final, gracias a Dios, firmé, estoy ayudando en el equipo y espero hacerlo mucho más.

—Su contrato finaliza esta temporada. ¿Hay alguna cláusula de renovación?

—Me parece que hay una cláusula en caso de ascenso y que yo disputara una serie de partidos, pero me pienso que tampoco llego porque me he perdido la primera vuelta.

—Le gustaría seguir aquí?

—Sé que acabo este año y ahora mismo no pienso más allá. Tengo que dar una buena segunda vuelta junto con el equipo, tengo que ayudarlo con juego y goles y, más adelante, si tenemos que hablar, ya hablaremos. Aquí estoy muy contento, estoy en casa, más adelante ya veremos. El mundo del fútbol es muy complicado porque no sabes nunca dónde estarás, pero sí que es verdad que aquí estoy muy cómodo y llevo muchos años fuera. El hecho de estar en casa, con tus amigos, con la familia, a tu tierra y jugando al club donde has crecido es un extra, estoy muy a gusto aquí.

—Qué sensaciones ha tenido a lo largo de la temporada?

—El inicio fue muy complicado porque vengo de un año difícil a Polonia. El equipo me apartó cuando me lesioné, estaba solo, y me hicieron una serie de cosas. Como persona me trataron fatal. Cuándo llego aquí, vengo con mucha ilusión, pero el hecho de volver a parar es como sólo ves un túnel y no ves la luz. Después de la operación, ya confías en estar bien y, a medida que empecé a entrenar, en diciembre ya veía que me notaba bien, pero no físicamente. Entonces también ves que tienes que tener una paciencia que no tienes, porque quieres estar al ritmo de tus compañeros pero es que los otros llevan seis meses compitiendo y ves la diferencia que hay. Al final, con paciencia y trabajo mental esperé mi oportunidad y sabía que, cuando me llegara, lo tenía que aprovechar. Era consciente de que en el momento que entrara, lo tenía que hacer bien para intentar no salir.

—La temporada más goleadora fue la 2016-17, cuando marcó 18 dianas con el Badalona. ¿Tiene sensaciones parecidas a las de aquel año?

—Podríamos decir que sí, pero al final la lesión te hace madurar y te hace crecer en muchos aspectos. Sí que tengo aquellas sensaciones, pero estoy en un estado más maduro, me cuido más. Cuando tienes una lesión grave, hace que seas mucho más profesional, cuidas mucho más el descanso, la alimentación, todos los pequeños detalles que antes quizás los pasabas más por alto ahora los prestas más atención. Cuando tú te cuidas tanto o estás dando tanto, acabas recogiendo los frutos.

—Por qué la metralleta?

—A mí me gusta ver vídeos de goles, no sé cuándo fue que vi un vídeo de Batistuta y Osvaldo que hacían la metralleta. Al final es una celebración de matador, marqué el primer gol y saqué la metralleta pensante, arraso con todo. Cuando estaba en el Atlético de Madrid hacía el rifle, porque tengo un amigo que es cazador y me dijo que lo hiciera un día y lo empecé a hacer y me fue bien. Ahora, aquí la empecé a hacer porque me gustó y espero hacerla muchos partidos.

—Se ha marcado una cifra de goles por hacer este año?

—Sí, pero me la guardo para mí. Es elevada, pero no la saben ni mis padres. Cuando quieres alguna cosa, siempre hay gente negativa que quizás te llama que no puedes y al final las energías negativas te acaban ganando. Así que no la digo porque nadie me pueda influir, y así pueda continuar convencido de que lo puedo conseguir.

—Qué piensa del caso Viti, afecta al equipo?

—Ahora mismo, el equipo está tan centrado en trabajar y tan bien en el día a día que, si te digo la verdad, ya no se habla del tema Viti. Sí que es cierto que antes, cuando era el momento, voces que uno llega tarde al partido y pues hablas. Pero al final eso te resta porque el tiempo que hablas de estas cosas, no lo dedicas a hablar de los entrenamientos o de como de bien está este. Ahora el equipo está centrado en el día a día y no hay estas despistadas de hablar de cosas que no tocan y eso también es importante.

—Cómo está el equipo después de esta dinámica de seis partidos sin perder?

—Veo que el equipo está creciendo y lo hará cada día más. El tema es que, al final, todos nos ilusionamos porqueni que estemos de la mitad hacia abajo, todos miramos de la mitad hacia arriba porque es lo que todos queremos. Espero que no lleguemos a final de temporada pensante que con dos o tres partidos más lo hubiéramos conseguido. El entrenador nos ha dicho que quedan ocho partidos en casa y que eso tiene que ser un fortín, sacar los 24 puntos, y a fuera intentar seguir con esta buena línea de ir puntuando tanto como podamos. Eso sí, está claro que tenemos que mirar partido a partido y con tranquilidad, porque sabemos de dónde venimos, y tenemos que empezar por hacernos fuertes en casa. Intentaremos quedar el más arriba posible, iremos cada partido a ganar. El equipo está muy bien, estamos creciendo y lo que nos queda para mejorar es con pelota, porque defensivamente estamos muy bien.

—Cree que el principal escollo es el tiempo?

—Sí, porque dudo de que haya alguna plantilla en un estado de forma mucho mejor que el nuestro, ahora mismo. Hemos jugado contra el Barça B y hemos ganado, contra el Cornellà hemos empatado y los dos están en play-off de ascenso. El equipo está compitiendo muy bien contra todos los rivales, en la primera vuelta la Andorra y el Llagostera nos marcó tres goles cada uno en nuestra casa y a la segunda vuelta hemos empatado en sus campos. Competimos de tú a tú contra todos los que están arriba. Creo que el equipo está en una dinámica positiva, está creciendo y el tope que tendrá lo veremos a final de temporada. Quizás sí que es el tiempo el que nos puede parar o impedir que conseguimos lo que todos querríamos.

—Merece Toni Seligrat estar una temporada más en el club?

—El entrenador está haciendo las cosas muy bien, pero no para que lo diga yo, el fútbol son resultados y puedes jugar mejor o peor, pero lo que valen son los resultados. Los que tienen que decidir son los directivos, pero estamos trabajando mucho cada día y los resultados están aquí y eso no lo puede quitar a nadie.