El filial del Nàstic centra todas las miradas del banquillo del duelo en Castàlia

De los dieciocho futbolistas convocados por Toni Seligrat este domingo para disputar el Castellón-Nàstic, hasta seis eran del filial. O sea, que un tercio de los jugadores que entraron en la lista, eran integrantes del CF Pobla de Mafumet.

Entre las lesiones de Fausto Tienza, Pedro Martín, Brugui, David Goldar, Javier Ribelles y Pol Prats y las ausencias, que se producen en muchas ocasiones, de Cheickh y Thomas Amang, Seligrat no tenía prácticamente efectivos del primer equipo.

Concretamente, doce. Contra el Castellón, jugaron once y el único que permaneció en el banquillo fue un Ferran Giner que acabó entrando en la segunda mitad, siendo el primer cambio de Seligrat.

En el banquillo esperaban al portero Arnau Riera, los laterales Cardona y Caballero (que debutaba en convocatoria con el primer equipo), el central Pol Domingo, el banda Guiu y el media punta Sergio Montero. Domingo y Guiu, habituales, en los planes de Seligrat, fueron los dos hombres escogidos, pero todos los problemas con las lesiones y las futuras sanciones de jugadores que irán acumulando tarjetas volverán a abrir, seguramente, nuevamente la puerta del primer equipo a jóvenes de la cantera.