Nàstic, objetivo Copa del Rey

Matemáticamente es posible pero, si no se quiere huir de la realidad, la promoción de ascenso es un objetivo imposible para el Gimnàstic de Tarragona. Después de una temporada que empezó de forma nefasta por culpa de una deficiente planificación de la plantilla, el Nàstic ha tenido que ir rebajando objetivos hasta soñar con el de clasificarse para la Copa del Rey de la temporada 2020-21.

Pocos eran los que esperaban que la cosa saliera tan mal, ya que, por presupuesto y por proyecto, el tarraconense tenía que ser un conjunto puntero en el grupo tercero de Segunda División B, luchando siempre por la promoción de ascenso a Segunda División A y, si fuera posible, por la primera plaza, que daba acceso al cambio de categoría mediante una única eliminatoria.

Han ido pasando las semanas y ahora la cosa ha cambiado, y mucho. El Gimnàstic es el decimocuarto clasificado, con 31 puntos, y lo que necesita, antes de todo, es asegurarse la permanencia en la categoría de forma matemática. Cuatro o cinco victorias en los once partidos que quedan le pondrían en bandeja esta meta, pero una entidad como la grana no se puede limitar a superar los 40 puntos y esperar a la temporada siguiente. Como la promoción está a quince puntos, toca intentar finalizar en posiciones que den derecho a disputar la Copa del Rey, una competición que siempre gusta por el hecho de poder jugar contra conjuntos de superior categoría.

Según la nueva reglamentación de la Copa, que entró en vigor la temporada pasada, entran a disputarla los 20 equipos de Primera División, los 22 de Segunda División A, 28 de Segunda División B (los siete primeros de cada grupo, que correrían en caso de que se encontraran entre ellos equipos filiales o dependientes), 32 de Tercera División (los 18 campeones y los 14 subcampeones con mejor coeficiente), 4 equipos finalistas de la Copa RFEF y 10 conjuntos de la máxima categoría territorial, resultantes de una eliminatoria previa entre los 20 campeones de cada Federación Territorial.

Entre los siete primeros

En el caso del Nàstic, tiene que intentar finalizar entre los siete primeros del grupo, una meta que, a primera vista, parecería demasiado ambiciosa, ya que el Olot estádiez puntos por encima de los grana. Ahora bien, como los filiales no pueden entrar a competir, ya que lo hacen sus primeros equipos, sería la décima posición la que, ahora mismo, tiene que perseguir el Nàstic. Curiosamente, esta décima plaza la ocupa elNucía, rival del Nàstic de este domingo.

Los alicantinos, décimos con 36 puntos, podrían quedar sólo dos por encima de los grana si los de Toni Seligrat ganaran, con que la meta de la Copa estaría todavía más cerca. Barcelona B, tercero, Villarreal B, quinto, y Espanyol B, octavo, son los tres filiales que se interponen entre se primeros clasificados y, por lo tanto, no se los tendría que contabilizar a la hora de decidir quién juega esta competición y quien no. El Atlético Levante, duodécimo con 35 puntos, también puede ser un equipo a tener en cuenta hasta a final de temporada si consigue mejorar sus números, con el que, incluso, el undécimo (ya que habría cuatro filiales por el medio) del grupo tercero de Segunda B podría tener posibilidades de disputar la Copa del Rey la próxima temporada.

Los siete que ahora entrarían

Si hoy finalizara el campeonato de Liga, los siete conjuntos del grupo catalán de la categoría de bronce que se clasificarían para la Copa del Rey serían Castellón, Sabadell, Cornellà, Lleida Esportiu, Olot, Andorra y la Nucía, mientras que no lo harían Ebro, Atlético Levante, Llagostera, Gimnàstic, Ejea, Hércules, Badalona, Prat y Orihuela. Quedan once jornadas para poner punto final al campeonato y, por lo tanto, puede pasar de todo, sobre todo dada la igualdad que hay siempre en la Segunda

División B, donde las diferencias entre los equipos no acostumbran a ser muy elevadas.

La pasada temporada, los siete conjuntos que tuvieron el privilegio de disputar la Copa del Rey fueron Atlético Baleares, Hércules, Cornellà, Lleida Esportiu, Badalona, Ebro y Olot. Este último fue el rival de unGimnàsticde Tarragona que consiguió pasar la primera ronda y que cayó en la segunda, en campo propio, contra el Zaragoza de Segona División A.

El ejemplo del Badalona

Algunos equipos, como el caso del Badalona, acabaron jugando contra rivales de Primera División, con todo lo que implica a nivel de billetaje y de escaparate para sus futbolistas. Oviedo (Segunda A) y los Primera Getafe y Granada pasaron por el EstadiMunicipal de Badalona en lo que fue todo un regalo para una afición que, caprichos del fútbol, ve como su equipo no consigue salir de las arenas movedizas que suponen la zona de descenso a Tercera División.