Fran Carbia tendrá que presionar al Ibiza para acabar vistiendo de grana

El Gimnàstic de Tarragona quiere a Fran Carbia y Fran Carbia quiere vestir la camiseta del Gimnàstic de Tarragona. Hasta aquí, la ecuación es muy sencilla. Se complica un poco más cuando entra un tercer actor, quizás, el más importante de todos. El Ibiza-Evissa, inmerso en la promoción de ascenso a Segunda División A, es el propietario de los derechos del delantero tarraconense y Carbia, con contrato en la entidad balear hasta el 30 de junio del 2021, tendrá que rescindir su contrato si quiere venir a Tarragona.

Esta rescisión es la que buscan tanto el club grana como el futbolista, aunque los movimientos, de momento, no han sido considerables. El jugador está de vacaciones, a la espera de conocer noticias, y las dos entidades van trabajando con sus respectivos objetivos. El Nàstic, intentando completar su plantilla y el Ibiza preparando este intento de asalto a la categoría de plata del fútbol español.

Ahora mismo, el Ibiza está en todo su derecho de pedir una cantidad por el traspaso de Carbia, mientras que el Nàstic también puede decir que no e intentar una rescisión sin abonar ninguna cantidad por la operación. Ahora bien, estos tipos de trasvases acostumbran a acabar con final feliz por el futbolista y los dos clubs realizando un esfuerzo. El club balear tendrá que bajar sus pretensiones iniciales, que podrían ser de unos 100.000 euros, mientras que el Nàstic, de momento, y teniendo en cuenta la situación económica actual motivada por el coronavirus, no tiene pensado realizar un gran esfuerzo por fichar a un futbolista con contrato en vigor.

Futbolísticamente, Carbia es una prioridad máxima en los esquemas de un Toni Seligrat que en los últimos días ha renovado como entrenador grana. Si no hay ningún cambio de última hora con respecto a los planes iniciales, la única incorporación en la parte ofensiva será la de Carbia. Hay muchos futbolistas actualmente en nómina e, incluso, algunos tendrán que buscarse equipo. Los ya conocidos de Romain Habran y Joel Marín no cuentan, mientras que, del resto, alguno más tendrá que buscarse la vida en otro equipo.

Carbia, desde su llegada al Nàstic cedido este pasado mercado de invierno, fue indiscutible. Entró en el duelo contra el Ebro en sustitución de Brugui, lesionado, y anotó un doblete. Partiendo habitualmente de lado izquierda ha sido uno de los guerreros preferidos de Toni Seligrat.