Las ligas catalanas arrancarán el primer fin de semana de octubre

La Federación Catalana de Fútbol ha dado luz verde a las fechas de inicio de competición del fútbol y fútbol sala para la temporada 2020-21. El acuerdo, aprobada en la reunión de la Junta Directiva correspondiente al mes de julio, que ha tenido lugar hoy en la sede central del FCF, en Barcelona, establece el fin de semana del 3 y 4 de octubre como el de arranque de las competiciones oficiales de ámbito territorial en Catalunya, con la disputa de la primera jornada de campeonato en las principales ligas, tanto de fútbol como de fútbol sala.

De esta manera, la Primera, Segunda y Tercera catalana levantarán el telón el primer fin de semana de octubre en el fútbol amateur masculino, y en el fútbol amateur femenino está previsto que arranquen en la misma fecha la Preferente y la Primera División.

Los grupos de Cuarta Catalana, así como los de División de Honor y Preferente masculina y femenina en fútbol base serán los siguientes al dar el pistoletazo de salida, el 10 y 11 de octubre. También en fútbol base, toda la Primera División, tanto masculina como femenina lo hará el 17 y 18 de octubre. Por otra parte, el resto de categorías del fútbol amateur femenino y formativas empezarán el fin de semana del 24 y 25 de octubre.

En fútbol sala, la División de Honor y la Primera Catalana masculina y femenina se empezarán el 3 de octubre, y también todas las categorías máximas de División de Honor, en la base. A su vez, la Segunda Catalana masculina y femenina y la Tercera Catalana lo harán el 17 de octubre, día en que también vivirán la primera jornada de liga el resto de categorías del fútbol sala base.

En todos los casos, estará como fechas de descanso la Navidad, sin competición los fines de semana del 27 de diciembre y el 3 de enero, y también la Semana Santa, con paro el 4 de abril. Sin embargo, se habilitarán como fechas para competir el puente de la Purísima, el 6 de diciembre, y también el Carnaval, el 14 de febrero, con motivo de la situación extraordinaria producida por la crisis sanitaria de la Covid-19, que obliga a confeccionar unos calendarios más compactos. Con todo, estas fechas están sujetas a posibles modificaciones.