Once catalanes para un grupo de 10 en Segunda División B

Este año la Segunda División B contará con 100 equipos, eso hará que los cuatro grupos de 20 equipos se conviertan en cinco y, a la vez, estos queden divididos en 10 subgrupos de 10 conjuntos cada uno, siguiendo los criterios de proximidad. Así pues, la primera parte de la liga de Segunda B constará de 18 jornadas, que, en función de los resultados, clasificará a los equipos en otros grupos para luchar por los diferentes objetivos como son el ascenso a Segunda A, el ascenso la nueva Segunda B Pro o la permanencia en Segunda B. Después del ascenso del Sabadell a Segunda A y del Hospitalet a Segunda B, la categoría de bronce del fútbol estatal cuenta con 11 conjuntos catalanes, eso hace que uno de ellos sobre para el previsible subgrupo de 10 equipos que se formará con los clubs de Cataluña. Por proximidad, el Lleida, como ya ha sucedido en alguna ocasión, podría ir a parar con los conjuntos de Aragón, pero el Nàstic también podría ser uno de los clubs que se moviera y se englobara con los valencianos.

En concreto, los 11 conjuntos adheridos a la Federación Catalana de Fútbol son el Barça B, el Cornellà, el Lleida, el Olot, el Espanyol B, el Andorra, el Llagostera, el Nàstic, el Badalona, el Prat y l'Hospitalet. Todo hace pensar que desde la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) compondrán un grupo de 10 equipos catalanes y, por lo tanto, uno de ellos se tendrá que marchar a otro. Las dos opciones que más fuerza toman son las de el Lleida y el Nàstic, aunque tampoco se podría descartar que fuera el Andorra el que se acabara marchando a otro grupo o que los catalanes quedaran divididos en dos grupos. El hecho de que el Cornellà no subiera a Segunda División A después de que este domingo perdiera la final del play-off de ascenso contra el Castellón (1-0), y que l'Hospitalet haya conseguido subir a Segunda B, hace que haya un exceso de clubs catalanes en esta categoría.

En el caso de Aragón, sólo son tres los clubs que se encuentran en esta demarcación y, por lo tanto, tendrán que buscar a más compañeros en otras comunidades, esta podría estar en la Rioja, donde ya han competido en alguna ocasión. Así pues, Ebro, Ejea y el reciente ascendido Tarazona podrían jugar contra el CD Calahorra, Haro Deportivo, SD Logroñés i Mutilvera, todos ellos de La Rioja, en el cual se añadiría el Lleida, hipotéticamente.

La segunda opción, sería que el Nàstic se juntara con los conjuntos de Valencia y Murcia, así pues, quedaría aparejado con el Villarreal B, La Nucía, el Levante B, el Valencia Mestalla, el Orihuela, el Hércules y el recién ascendido Atzeneta. En total, son siete conjuntos valencianos que necesitan 3 conjuntos más para formar al subgrupo de 10 equipos. Si se sumara el Nàstic a este grupo, faltarían dos que podrían provenir de la Región de Murcia, la comunidad más próxima a Valencia. En este lugar hay el Yeclano Deportivo, el Real Murcia, el UCAM Murcia y el Lorca Deportiva, así pues, en caso de producirse esta segunda variable, los equipos murcianos quedarían divididos en diferentes grupos, ya que si se suman los valencianos, el Nàstic y los murcianos, también se pasa de 10. La tercera opción, a pesar de que más remota, sería que fuera el Andorraquién abandonara el grupo catalán, para ocupar, por ejemplo, un lugarcon los conjuntos aragoneses, es decir, la misma situación que el Lleida.

Dividir el grupo catalán en dos

Finalmente, una cuarta hipotética opción, sería que los 11 conjuntos catalanes quedaran repartidos en dos subgrupos. Una opción sería que seis conjuntos quedaran aparejados con los Baleares, el Ibiza, el Atlético Baleares, el Peña Deportiva y el Poblense, que conformarían un subgrupo de 10. Los cuatro restantes se podrían repartir o bien con los conjuntos de Aragón y la Rioja o bien con los de la Comunidad Valenciana y la Región de Murcia. En cualquier caso, el RFEF tendrá mucho trabajo para encuadrar los 100 equipos de Segunda División B en cinco grupos de 20 conjuntos, que acabarán conformando 10 ligas de 10 equipos cada una. Siguiendo el ejemplo de la temporada 2019-20, el RFEF decidió incluir en el grupo tercero los clubs catalanes, los valencianos y los aragoneses, pero esta ecuación no se podrá repetir este año, ya que sin descensos pero sí con ascensos, el número pasa de 20 equipos a 21. Los catalanes se mantienen en 11 después del ascenso del Sabadell en Segunda A, pero también del de l'Hospitalet a Segunda B, los valencianos también se mantienen con 7, ya que el Castellón ha subido a Segunda A, pero el Atzeneta de David Albelda lo ha hecho a Segunda B, y los aragoneses aumentan el número de equipos de dos a tres, con el ascenso del Tarazona. Una definitiva opción para la composición del grupo de 10 equipos, sería que de estos 21 conjuntos que se han mencionado, sólo se marche uno de ellos y el resto queden divididos, siempre siguiendo el criterio geográfico.