Giner, Pereira y Habran vuelven a entrenar con el resto del grupo

Ferran Giner, Jonathan Pereira y Romain Habran siguen sin resolver su futuro con el Gimnàstic de Tarragona, pero se ha producido una novedad en el día a día de los tres jugadores. Aunque no iniciaron la pretemporada con el resto de compañeros, ya se han sumado con el grupo y, desde el lunes, ya se ejercitan. No lo hacen como uno más, ya que no completan todos los ejercicios que planifica el cuerpo técnico de Toni Seligrat, sino que realizan una buena parte de las sesiones.

El hecho es que los futbolistas entendían que, por contrato, tenían el derecho de entrenar con normalidad. Estuvieron las primeras semanas de pretemporada apartados, pero el club no ha podido mantener más esta situación y ha accedido a reincorporarlos. Ahora bien, en ningún momento cuentan de cara a la próxima temporada y, por lo tanto, las posibilidades con que acaben su contrato con el Nàstic y, por lo tanto, se queden un año más en Tarragona, son cero.

La situación que se ha originado no es la más cómoda, ni para los tres jugadores ni para el resto del equipo. Ni Giner, ni Habran ni Pereira ofrecieron la temporada pasada el rendimiento que se esperaba de ellos, pero el club les firmó dos años de contrato y, por lo tanto, tienen todo el derecho de quedarse hasta el 30 de junio del 2021 si así lo desean, o bien buscar la mejor de las rescisiones de contrato. Al final, estas situaciones acaban resumiéndose en un tema económico. Los futbolistas piden todo lo que les resta cobrar del contrato y el club intenta el mejor trato. Un término medio acostumbra a ser el acuerdo final, aunque estas situaciones se acostumbran a alargar en el tiempo. Los jugadores no pueden eternizar el conflicto, ya que el inicio de la temporada se va acercando y, por otra parte, el club de origen, en este caso el Nàstic, no puede contar eternamente con futbolistas que no cuentan.

Trillas, por fin

Por otra parte, el Nàstic anunció la llegada de Marc Trilles, procedente del Lleida Esportiu. El central llegó a un acuerdo con el Nàstic hace aproximadamente dos meses, pero tenía bloqueada la salida del Lleida Esportiu. No ha sido hasta esta semana cuando el futbolista, así como Joan Oriol, ha podido abandonar la disciplina leridana para firmar su contrato con lo que será su equipo las dos próximas temporadas.