Javi Bonilla se reivindica en el Nàstic
El lateral marcó un golazo al Barça el sábado a pesar de jugar en una posición diferente a la suya y presenta candidatura a ser importante
Javi Bonilla quiere ser un jugador importante en el Gimnàstic de Tarragona 2020-21. Ya fue de los jugadores más determinantes en ataque
–a pesar de ser defensa– la pasada temporada, pero este año también tiene ganas de ser de los jugadores que tiren del carro. El fichaje de Joan Oriol, procedente del Lleida Esportiu, no frena las ganas de ayudar de un Bonilla que seguramente tendrá que reinventarse si quiere contar con un número similar de minutos al de la temporada pasada.
El lateral izquierdo brilló este sábado en el Estadio Johan Cruyff, sobre todo por el golazo que marcó, en la primera mitad, una diana que no pudo impedir un Neto que hizo la estatua ante el tiro del zurdo, impecable y cerca de la madera, allí donde los metas nunca pueden llegar.
Bonilla fue titular, pero no lo hizo en su posición habitual, la de lateral izquierdo. Actuó como interior zurdo en el centro del campo, en el 4-3-3 que está dibujando a Toni Seligrat en este inicio de pretemporada. Joan Oriol fue titular en el carril izquierdo de la defensa y, por lo tanto, no había sitio aquí para Bonilla. No sólo no desentonó el soriano, sino que se ha convertido en una posibilidad real para la medular en un equipo que, si acaba actuando con tres centrocampistas, tendrá que contar con más hombres específicos de los que tiene en esta demarcación en estos momentos.
Ahora mismo, los medios que hay en la plantilla son Fausto Tienza, Javier Ribelles y Fran Miranda. A la espera de la llegada de Francesc Fullana y también la de Quim Araujo, al Nàstic no le iría nada mal tener el comodín Javi Bonilla en el centro del campo cuando este jugador no actúe como lateral izquierdo.
En principio, Joan Oriol, una de las fuertes apuestas del club grana este verano, apunta a la titularidad en el carril izquierdo de la defensa. Al menos, de inicio. Sin embargo, las características de Bonilla son bien diferentes y su aportación, sobre todo en faceta ofensiva y en pelota parada, son importantes para un equipo que, la temporada pasada, dependió mucho del rendimiento del ex del Ibiza en la parte atacante.