Entrenador del Gimnàstic de Tarragona
«Nos perdimos el mejor momento del equipo porque la liga se detuvo»
«El objetivo máximo que se tiene que marcar el Nàstic es subir de categoría y, el mínimo, la Segunda B Pro», dice el técnico para su segunda temporada de grana
El Gimnàstic de Tarragona juega esta tarde, a las seis y media, un nuevo amistoso de pretemporada (Nàstic-Zaragoza, segundo partido que el club ofrecerá por Youtube y que los nuevos socios podrán ver gracias a un enlace que les facilitará la entidad horas antes del duelo). Lo hará, como siempre, a las órdenes de un Toni Seligrat que afronta la nueva temporada ilusionado y con ganas de devolver al club grana al fútbol profesional.
—¿Cómo está encaminando esta pretemporada tan atípica?
—Esta es la palabra. Es atípica y anormal. Eso que hemos hecho de anticiparnos a los acontecimientos, de planificar un trabajo previo sin saber qué pasará, dará mucha calidad a la pretemporada y a la temporada.
—¿Qué tipo de temporada espera?
—Si una cosa he aprendido de esta pandemia es a no pensar mucho más allá, pero lo único que quiero es tener una gran capacidad de adaptación. Que no me sorprenda nada y poder estar preparado para aquello que pueda venir.
—¿Tienen previsto que pueda haber un posible parón?
—De momento, cómo preparas un posible inicio de Liga que no sabes ni dónde será ni cuándo se producirá? Pues empezando un buen día, tomando decisiones. Puedes fallar o acertar. ¿Cómo preparas un parón antes de tiempo? Haciendo las cosas extraordinariamente bien desde el comienzo.
—¿Dos partidos por semana le habría parecido una buena idea?
—No, sobre todo por la falta de costumbre. En Segunda B no estamos acostumbrados.
—¿Nota que hay miedo entre los jugadores?
—Nada. El ambiente que tenemos en cada entrenamiento denota que no hay miedo.
—¿Qué le pasó por la cabeza cuando se paró todo la temporada pasada?
—Creía que volveríamos a empezar, que era un tema puntual, de dos o tres semanas, y que llegaría la normalidad pronto. Nunca se me habría pasado por la cabeza que confinarían prácticamente a todo el mundo.
—¿Cómo vivió estos meses en casa?
—Bien, porque me sentí muy útil. Fui a casa de mi madre, que es mayor, y la ayudé muchísimo. También estuve pendiente de mi mujer y de mi hijo.
—Cuando la temporada pasada sustituyó Xavi Bartolo, ¿pensaba que sería tan complicado salir del pozo?
—Sí. Sabía que sería muy complicado. Salir del pozo en Segunda B cuesta mucho y, cuando un equipo tiene el objetivo opuesto, o sea, que quiere subir, cuesta mucho.
—¿El equipo cumplió con las expectativas que usted se fijó al llegar?
—Teníamos que ir por pasos. El primero era salir de donde estábamos. El segundo paso, hacerlo con una identidad, pero nos perdimos el mejor momento del equipo porque la liga se detuvo.
—¿Hasta donde habría llegado el equipo?
—A competir cada semana sin sufrir por la zona baja.
—¿Qué era más importante entonces, fichar jugadores o dar bajas?
—Necesitábamos ambas cosas. Que saliera gente que no se moría de ganas de estar aquí y que yo consideraba que no tenían el nivel y, por otra parte, traer lo contrario, jugadores con ganas de venir y con el nivel que requiere este club.
—¿Por qué perdieron las ganas a estos jugadores?
—Es que no sé si en julio las tenían.
—Tanto en este presente mercado como en el de invierno del año pasado Toni Seligrat tiene mucha incidencia en la confección de la plantilla. ¿Esta es la plantilla de Toni Seligrat?
—Esta es la plantilla del Nàstic, porque Toni no trabaja solo. Yo no haré nada que no esté consensuado por mi equipo de trabajo y por mi presidente, que participa activamente en todas las decisiones que se tomen. Nunca daré un paso sin la aprobación de Sergi Parés y de Josep Maria Andreu.
—¿Qué le falta a esta plantilla?
—De momento, algún elemento más y, después, asimilar una serie de conceptos, que para eso está la pretemporada. Después de asimilarlos, los tenemos que hacer nuestros. Tenemos que hacer que fluyan.
—A nivel de elementos, ¿un central y dos centrocampistas serían suficientes?
—Creo que lo mínimo que necesitaríamos son un central y un centrocampista ofensivo. También nos iría bastante bien un futbolista más, de perfil ofensivo. La pretemporada ya marcará esta última necesidad.
—¿Y qué le sobra al equipo?
—Gente. Somos demasiada gente. Entre que tienes futbolistas del filial, a prueba... Nos sobra gente para hacer un trabajo de más calidad, pero eso acostumbra a pasar en las pretemporadas.
—¿Molesta tener jugadores con los cuales no cuenta?
—Es una situación dura para el futbolista, ya que sabe que no se cuenta con él y también para los que estamos aquí, ya que yo aprecio a todos los jugadores que tengo aquí. Eso no es un club social, es un club deportivo, con funcionamiento de empresa y no se tiene que ser ni mejor ni peor persona, se tienen que tener condiciones y talento y, en ocasiones, en el fútbol un entrenador, ya sea por una mala temporada o una lesión, piensa que no eres útil.
—Aparte de Giner, Habran y Pereira, ¿sobra alguien más?
—De momento, estos tres.
—¿Cómo está el caso de Joel Marín?
—Se tiene que separar a los jugadores sub-23 y los que no lo sean. Al Joel que me encontré el año pasado era un jugador no útil para nosotros. Este año pienso todo lo contrario, me he encontrado un Joel totalmente diferente. Me gusta y creo que nos puede ayudar.
—¿Qué tal es Prudhomme?
—Es un futbolista joven, talentoso y creo que con mucho margen de mejora. De hecho, él está un poco en estado de shock porque dice que ha llegado a un club donde se trabaja mucho, muy bien y con mucha intensidad, y no está acostumbrado. No deja de ser una apuesta, tiene un potencial importante.
—¿Qué conclusiones extrae de los partidos contra Horta y Barça?
—Primer y segundo partido de pretemporada. El segundo tenía que ser la Pobla y no el Barça y, el tercero no era el Zaragoza A, sino el B. Quería empezar con tres partidos contra equipos de Tercera División, y mira lo que hemos hecho. Pero también tiene su lado positivo. Son compromisos de club que tenemos que respetar. Acabé contento del partido del Horta, pero es el primero. El segundo estuvo a un nivel muy por encima de lo que yo podía esperar del equipo. Eso dice mucho de nuestra plantilla y de nuestros futbolistas.
—¿Cuál es el máximo objetivo del Nàstic?
—Subir.
—¿Y el mínimo?
—Segunda B Pro.
—Si no se ganan los primeros partidos, ¿entendería que aparezca ansiedad?
—En este club hay mucha exigencia y los nervios pueden aparecer, pero a mí no me vendrán. Tengo que intentar que a mí me vean tranquilo si llegan los nervios.
—¿Qué piensa del hecho de que digan que Toni Seligrat es un entrenador defensivo?
—Que no me conocen. Ahora bien, en la Segunda B tienen éxito los mejores equipos defensivamente. El 75% de equipos marcan 0 o 1 goles de media. Es muy importante que no te marquen goles, ya que tú, por estadística, marcarás cero o uno, por eso es tan importante la faceta defensiva.