El Nàstic no arranca (0-0)
Los tarraconenses empatan en su estreno en casa con errores claros de cara a portería
El Nàstic sigue sin levantar cabeza. El equipo suma el primer punto Liga, pero lo hace en casa y contra el Badalona, en un enfrentamiento en el cual, sobre el papel, el equipo grana tenía que haberse quedado con el triunfo pero, en el mundo del fútbol, no siempre gana el club con mejores futbolistas.
Sí que fue mejor el Nàstic, también tuvo más ocasiones y, quizás, el árbitro también perjudicó con un gol anulado a Marc Trilles. Pero Gerard Oliva no tendría que haber fallado una ocasión clarísima y el palo de Carbia también podría haber entrado. El hecho es que un punto de seis es innecesario.
Thomas Amang fue la mayor de las novedades en el once de Toni Seligrat. Los buenos minutos que ofreció en Llagostera dieron la titularidad al africano, quien partió desde la banda izquierda. Pedro Martín fue el perjudicado por la decisión del técnico grana. Gerard Oliva y Brugui lo acompañaban a la delantera. El centro del campo fue lo mismo de Johan Cruyff y la defensa también fue idéntica a la que cayó en el estreno del campeonato de Liga. Otra de las novedades era Gonzi que se estrena en el campeonato doméstico después de ser el titular en la Copa Federación.
Primera parte con dominio local, pero sin la claridad que reclamaba el duelo. Brugui era el hombre que llevaba más peligro, por la banda derecha, siempre intentando buscar diagonales y a un Gerard Oliva que estaba más por el suelo que por el aire. La defensa visitante, muy agresiva, impedía toda acción de peligro. Amang, perdido y la pelota no pasaba por el centro del campo. Ahora bien, sin embargo, las ocasiones más claras las tuvo el conjunto de Toni Seligrat.
A los seis minutos, Bonilla remató una centrada de Brugui, a manos del meta. El lateral izquierdo, que actuaba nuevamente en el centro del campo, no conectó la esférica como quería. El mismo Brugui, a los diecisiete minutos del enfrentamiento, lo intentó desde lejos, sin suerte. También tuvo su ocasión el Badalona, con un remate de Meléndez que Gonzi desvió en la esquina. Antes del descanso, quien la tuvo fue Joan Oriol. En el minuto 35, el lateral cambrilense disparó con su pierna mala y, a pesar del peligro, la pelota no entró.
El Nàstic no estaba mal, pero tampoco bien. Más se le tiene que reclamar a un equipo que juega en casa, que tiene la plantilla que tiene y que tiene que ganar todos los partidos, sin excusas. Tienza demuestra que, cuando esté bien, será determinante, pero de momento no lo está. Ribelles destruye, no construye, y Bonilla es más un arribador y un centrador o rematador que un constructor de juego. En el 4-3-3, el centro del campo tiene que funcionar de otra manera y, durante los primeros 45 minutos, no fue así.
Falla Oliva
Con mejores intenciones empezó el Nàstic la segunda mitad. Tuvo el gol en sus botas Gerard Oliva, pero no remató entre los tres palos un gol que parecía hecho. Estuvo en una buena acción de Amang por la izquierda que, entre empuje, consiguió encontrar un agujero que lo condujo en Oliva. Desde dentro del área, y con el portero en frente y un defensor, el de Riudecanyes escogió mal. Disparó alto cuando, en el palo largo del portero, habría podido hacer mucho daño. No fue así y el Nàstic perdonó la ocasión más clara del enfrentamiento.
No lo veía claro Toni Seligrat, quien decidió realizar un triple cambio cuando pasaba el cuarto de hora de la segunda mitad. Entraban Joel Marín, Fullana y Fran Carbia y abandonaban su lugar Brugui, Tienza y Amang, respectivamente. Este aire fresco ayudó en el Nàstic a empujar, con más corazón que ninguno. se acercaban los momentos de los nervios y el Nou Estadi, vacío, vio cómo le anulaban un gol a Carlos Albarrán en un fuera de juego más que dudoso.
Los cinco cambios
No había momentos para la duda. También entraron Pedro y Marc Trilles, en el 76,’ en un intento de Toni Seligrat de gastar todas las balas que tenía disponibles. Una falta ensayada a cinco minutos del final acabó en la madera, en la que se presumía como una de las últimas ocasiones de un Nàstic de que veía que, poco a poco, se le acababan las fuerzas y, con ellas, las posibilidades de sumar los primeros tres puntos de la temporada.
La fuerza, el empuje y las ganas no fueron suficientes, y el Nàstic, volcado en el área contraria, se tuvo que conformar con un empate que, aunque ayuda a sumar el primer punto de la temporada, es insuficiente.
Ficha técnica
Nàstic . Gonzi, Carlos Albarrán, Quintanilla (Marc Trilles, 76), Jesús Rueda, Joan Oriol, Javier Ribelles, Fausto Tienza (Francesc Fullana 62), Javi Bonilla, Brugui (Joel Marín, 62), Gerard Oliva (Pedro Martín, 76) y Thomas Amang (Fran Carbia, 62).
Badalona. Áléx, Robert Simón, Robusté, Llerena, Goyo (Musa, 64), Meléndez (Cristian Márquez, 86), Josep Jaume, Núñez, Galindo (Jordi Cano, 71), Roger (Aparicio, 86) y Chema Moreno.
Goles. No hubo.
Árbitro. Sergiu Claudiu Muresan Muresan (Valenciano). Mostró la tarjeta amarilla a los locales Brugui, Jesús Rueda i Quintanilla; y a los visitantes Núñez, Robert Simón, Josep Jaume i Aparicio.
Incidencias. Partido a puerta cerrada en el Nou Estadi.