Apoteósico (4-2)

Apoteósico lo sucedido en el Nou Estadi, con un Nàstic que se veía abocado a la derrota perdiendo 0-2 y sin Carlos Albarrán, expulsado, y que acabó goleando (4-2) gracias a un doblete de Brugui y a las dianas de Gerard Oliva y de Quintanilla. Nunca un partido pareció tan perdido y acabó de esta manera.

Cambios en todas las líneas por parte de Toni Seligrat. Tanto el empate de los grana en el Municipal Sagnier como situaciones relacionadas con sanciones y lesiones volvieron a sacudir los cromos de un Seligrat que, para empezar, presentó un relevo en la portería. Wilfred, ya recuperado de su lesión, entró por Gonzi. En defensa, Carlos Albarrán volvía después de sanción y quien no jugaba por la roja que vio ante el Prat era Marc Trilles. Jesús Rueda lo sustituía. En el centro del campo era novedad Fran Miranda por Javier Ribelles, acompañado siempre de Javi Bonilla y de un ya consolidado Francesc Fullana. Brugui en la derecha, Gerard Oliva por el centro y, a la izquierda, nuevo cambio. En vez de Pol Ballesteros actuaba Thomas Amang en el ya tradicional baile de rotaciones en este lado del ataque grana que, de momento, no ha encontrado amo y señor.

El Nàstic se hizo el amo y señor del partido desde desde el principio. Con ganas de ganar y de gustar, los futbolistas locales no tan sólo presentaron candidatura a ser protagonistas del juego, sino que demostraron una capacidad de presión que no se había visto, al menos de forma tan evidente, durante los últimos enfrentamientos. La consigna de Seligrat era clara: presionar arriba impidiendo la salida de la pelota rival. Gerard Oliva lució más que nunca en el partido en el cual mostró más precisión y Brugui, todo calidad pero que nunca escapa de un buen cuerpo en cuerpo, también demostró sus habilidades. Más intermitente Amang que, como siempre, una de cal y una de arena. Concentrado en ciertos momentos y completamente desconectado en otros.

Pudo cambiar muy pronto el signo del enfrentamiento, aunque tanto la defensa rival como el portero estuvieron atentos. En la primera acción de todas, centro desde la banda izquierda que llega a rematar Brugui y que, en primera instancia, desvió Bañuz con la punta de los dedos y, después, un defensor rival. Pidieron manos a los jugadores del Nàstic, pero nada de nada, según el colegiado.

Se creció poco a poco un Nàstic que, con circulación lenta y pausada, buscaba encontrar espacios como el que consiguió dibujar a los once minutos de juego, cuando Oliva ganó un cuerpo a cuerpo complicado con un rival y vio cómo hacía la diagonal Brugui. El zurdo hizo la carrera pero se encontró con la mano de Bañuz que, seguramente le llegó a impactar, siempre después de la pelota. También lo probaba el Nàstic de lejos, como en el minuto 16, cuando Bonilla, desde fuera del área, disparaba cruzado, a la izquierda de la meta defendida por Bañuz.

Marca Carlos Martínez

Cuando mejor estaba el Nàstic, golpe muy duro en forma de gol visitante. Robo de pelota, contraataque de libro y gol de Carlos Martínez a los 25 minutos de juego. Prácticamente no se había acercado el Andorra a la meta rival y, en la primera que tuvo, abrió la lata.

La réplica grana no tardó en producirse y, además, fue doble, pero la pelota no entraba. Primero, Rueda remataba, rozando la escuadra, un centro lateral en el 29’ y, cinco minutos después, Quintanilla, también de cabeza, acariciaba el gol a la salida de un córner. No era porque el Nàstic no lo intentase, pero la pólvora se mojó durante la primera mitad.

Peor, imposible

Cuando lo único que podía pasar por la cabeza de los jugadores tenía que ser empatar rápidamente, lo que sucedió fue todo lo contrario. Muy mal rechace de Wilfred a los pies de un rival, de Bover, en tres cuartos de campo. Con defensores anticipados, el centrocampista del Andorra no encontró ningún tipo de oposición, avanzó paso a paso y, cuando lo creyó conveniente, disparó, imposible para un Wilfred que empezó la jugada con esta pifia en forma de pasada al rival.

Los nervios llegaron a los jugadores del Nàstic. Las imprecisiones en los pases hicieron acto de presencia demasiado pronto y el Andorra lo aprovechó para controlar el duelo. El primer movimiento en forma de cambio de Seligrat tardó 62 minutos en hacer acto de presencia. Joel Marín, futbolista que estaba pidiendo paso en las últimas semanas, entró por Fran Miranda. Cambio puramente ofensivo y que también sirvió para retrasar ligeramente la posición de Bonilla, dejando a Fullana y al propio Joel como interiores.

Albarrán, expulsado

El partido entró, a partir del segundo del Andorra, en un punto de locura de aquellos que gustan en los que acaban siendo protagonistas en positivo y que hunden al rival. Expulsión por roja directa de Carlos Albarrán en el 69’, por una dura entrada en la medular y, cuando todo hacía indicar que esta circunstancia provocaría una goleada, reaccionó el Nàstic. Primero, con el 1-2 de vaselina de Gerard Oliva en el 73’ y, cinco minutos más tarde, con el empate de Brugui, que envió al fondo de la red de tijera un gran centro desde la derecha.

Todavía quedaba un mundo por disputarse. El Nàstic, con uno menos, lo tenía muy complicado, sin embargo, cosas del fútbol, acabó goleando. Quintanilla, en el 90’ tocado, aprovechó un rechace en el interior del área para poner el tercero y, con el partido vencido, en el 95’, Brugui recogió una esférica en el centro del campo, puso todo lo que le quedaba de energía, condujo e hizo el cuarto. Increíble lo que se vio en el Nou Estadi.

FICHA TÉCNICA

NÀSTIC

Wilfred, Carlos Albarrán, Quintanilla, Jesús Rueda, Joan Oriol, Fran Miranda (Joel Marín, 62’), Francesc Fullana (Fausto Tienza, 71’), Javi Bonilla, Brugui, Gerard Oliva (Pol Domingo y Thomas Amang (Fran Carbia, 71’).

ANDORRA

Bañuz, Gaffour, Adrià Vilanova, Rai Marchán (Víctor Casadeús, 89’), Borja, Riverola, Bover (Marc Aguado, 77’), David Martín, Carlos Martínez (Ballarín, 77’), Rubén Enri (Iker Goujón, 89’) y Pau Martínez.

GOLES

0-1, Carlos Martínez (25); 0-2, Boyero (48); 1-2, Gerard Oliva (73); 2-2, Brugui (78); 3-2, Quintanilla (90); 4-2, Brugui (95)

ÁRBITRO

Raúl Campos Hierro (catalán). Mostró la tarjeta amarilla al local Brugui; y a los visitantes Rai Marchán y Rubén Enri. Mostró la tarjeta amarilla al entrenador local, Toni Seligrat. Mostró la tarjeta roja a Carlos Albarrán (69).

INCIDENCIAS

Partido a puerta cerrada en el Nou Estadi.