El CE Unión Astorga renueva la imagen y promueve los valores sociales del fútbol
El nuevo coordinador del club está reformulando por completo la estructura de la base
«Queremos que los niños se lo pasen bien, adquieran valores y aprendan». Bajo estas premisas el nuevo coordinador del Club Esportiu Unió Astorga, Jordi Tobias, ha renovado la imagen de un club que, hasta hace poco, «tenía mala imagen». Tobias ha cogido las riendas del club con la confianza del presidente, pero, sobre todo, del Ayuntamiento de Reus quien «me dijo que se me quedara definitivamente como coordinador», tal como explica el mismo Jordi Tobias. Y es que «yo entré a finales de julio de manera provisional, mientras buscábamos a un nuevo coordinador, pero el trabajo que hice les gustó y por eso me he quedado», comenta Tobias.
«Lo primero que me encontré cuando entré fue un club sin material para poder entrenar, sin entrenadores en pleno agosto, con sólo 70 niños, sin camisetas para poder jugar, etc., comenta el nuevo coordinador, quién añade que el primer paso fue comprar todo el material nuevo y hablar con entrenadores. Estos nuevos técnicos que buscaron para renovar el fútbol base del Astorga fueron «jóvenes, con ganas de trabajar y, sobre todo, que los niños estén contentos», priorizando eso por encima de los resultados que se puedan obtener, es decir, poniendo de relieve lo que es importante en las categorías del fútbol base, el crecimiento de los niños independientemente de los resultados.
La renovación de la imagen del club también pasó por la contratación de un fotógrafo propio, nutricionista, fisioterapeuta y entrenador de porteros, que va todos los martes y está abierto para todos los chicos que sean porteros o quieran probarlo, aunque formen parte de otro club. Además, también tienen previsto grabar todos los partidos de casa para que «los entrenadores puedan analizar su equipo y ver las imágenes con los jugadores para comprobar lo que se hace bien y lo que hay que mejorar», explica Tobias. Por lo tanto, el nuevo coordinador busca que los niños y niñas que forman parte del Astorga se sientan como si estuvieran en el fútbol profesional.
«Este es un club de integración social, tenemos 10 nacionalidades diferentes en el club, hay muchos niños que vienen de centros de acogida y que tienen dificultades para pagar, lo único que pagan son 20 euros al mes», detalla Tobias, quién reconoce que «así es difícil que el club se levante, sin ningún recurso económico, pero estamos contentos con los patrocinadores que nos están ayudando».
Con respecto al número de niños, de los 70 que eran a finales de julio, ahora son casi 140, que están repartidos en ocho equipos. Un baby, uninfantil, dos cadetes, dos juveniles, un amateur y uno femenino. Otro de los cambios que se han realizado, y que deja entrever la ambición del club, es que han establecido un mismo modelo de juego para todas las categorías, de esta manera «facilitamos al niño que suben de categoría, tener los conceptos más o menos adquiridos y se adaptan de manera mucho más sencilla en el nuevo entrenador y grupo».
Además, con el fútbol como excusa, cada mes los diferentes equipos de la base trabajan una de las 10 nacionalidades que hay en el club con el fin de fomentar más la integración y, también, trabajan los valores, como la diversión, adaptando diferentes actividades en función del equipo. A pesar de esta nueva aventura que empieza ahora el Astorga con mucha ilusión, también son conscientes de que la situación económica es muy delicada y, por eso, siguen buscando patrocinadores.