El Nàstic querrá gustar al Nou Estadi contra un engañoso Espanyol B

«Cuidado con el Espanyol B, para mí es uno de los equipos que me ha gustado esta temporada». Esta frase se le ha escuchado en varias ocasiones a Toni Seligrat, entrenador del Gimnàstic de Tarragona, a la hora de valorar un equipo que no ha tenido suerte con respecto a resultados, pero que practica un fútbol bonito, atractivo y que no gusta nada a los rivales a los cuales se tiene que enfrentar. Sin ir más lejos, el que será el próximo rival del Nàstic este domingo a las doce del mediodía en el Nou Estadi, realizó un gran partido el pasado domingo contra el Barcelona B, pero acabó cayendo, 0-1, continuando con su particular tónica de no encontrar el éxito esperado en el electrónico a pesar de merecer mejor premio.

El filial blanquiazul practica un fútbol vistoso, rápido y atractivo, pero estas características no le han servido al equipo de José Aurelio Gay para poder completar una buena temporada a nivel clasificatorio. Ahora mismo, el filial espanyolista es el antepenúltimo clasificado del subgrupo 3A de Segunda División B. Con dos jornadas por disputarse, tiene la séptima posición a 25 puntos, por lo que, probablemente, excepto una carambola improbable, el objetivo de los espanyolistas será el de intentar descender una única categoría. Hay que recordar que el hecho de no acabar entre los dos primeros grupos de la clasificación significa la imposibilidad de luchar por jugar en la Primera RFEF (tercera categoría a nivel nacional), con lo que el objetivo más realista del Español B será intentar acceder a la Segunda RFEF (cuarta categoría) y no caer a la Tercera RFEF (quinta), ya que significaría un fracaso absoluto.

Un tarraconense y la delantera

Uno de los máximos valores de la cantera espanyolista es un joven nacido en Tarragona se trata de Lluís Recasens quien, a sus dieciocho años, se ha consolidado en el equipo de Gay. Es el defensor con más minutos, ya que acumula 1.374 en lo que va de temporada y, si su carrera no se encuentra con ningún contratiempo en forma de lesión, se puede convertir en un futbolista de élite por muchos años.

Ahora bien, el punto fuerte de este equipo es la delantera. Siempre con el permiso del también joven Gori, centrocampista de dieciocho años que gusta y se gusta jugando a fútbol. Los Becerra, Jutglà y Max Svensson son los tres futbolistas con los cuales tendrá que estar más atenta la conjunta grana. Jutglà es una auténtica pesadilla por banda izquierda, mientras que Becerra, a sus 22 años, ha anotado seis goles en lo que va de temporada y su salto a la profesionalidad está a punto de caramelo. Svensson, de diecinueve años, ha participado menos, pero acostumbra a ser un revulsivo muy a tener en cuenta.

El del domingo será el primer partido con público en el Nou Estadi en lo que va de temporada. Los aficionados podrán volver a ver a los suyos en directo después de un año sin poder entrar en el campo por culpa de las restricciones provocadas por el coronavirus. La Generalitat permite un millar de personas en las gradas y estas son las que acudirán a ver a los jugadores.