Fullana y Bonilla no encuentran el momento para coincidir en un once del Nàstic

Fran Miranda, Fausto Tienza y otro futbolista. Este es el centro del campo tipo del Gimnàstic de Tarragona esta temporada. Toni Seligrat, en su 4-3-3, siempre apuesta por un mediocampista de cariz|canto defensivo, en este caso Miranda, uno mixto, más bien todoterreno, que siempre es Tienza, y otro que se encarga de remover la esférica y de probar chutes o intentar la última pasada. Aquí está donde aparecen Francesc Fullana y Javi Bonilla.

Al inicio de la temporada, los dos jugadores coincidieron en un gran número de onces sin embargo, con el paso de los partidos, Seligrat ha apostado por optar por uno de ellos en cada duelo, con contadas excepciones. Situar a los dos en una misma alineación significa, sin ningún tipo de dudas, perder fortaleza defensiva y, en consecuencia, una merma del equilibrio de un equipo que ha sido capaz de convertirse en uno de los más goleadores y en uno de los que menos dianas encaja.

En las últimas semanas, los partidos del Nàstic han sido muy intensos, con pocos goles y con una gran tensión sobre el verde. Se podría decir que, desde el final de la primera fase del campeonato, el Nàstic está jugando partidos más propios de play-off que de liguillas. En estos enfrentamientos, la presencia de Miranda y de Tienza juntos se hace necesaria, pero también castiga la creatividad de la medular, ya que entre Fullana y Bonilla sólo puede jugar uno. En la mayoría de los casos, el escogido es el zurdo.

Este pasado domingo, sin embargo, fue el turno de Francesc Fullana. El Collao es un terreno muy complicado, sobre todo para los jugadores que tienen calidad en las botas y que basan su juego en la circulación de pelota. Este fue uno de los motivos por los cuales Fullana no pudo exhibir su juego, así como tampoco lo pudo hacer Bonilla cuando entró en la segunda mitad.

En el anterior partido, el primero de la segunda fase, Toni Seligrat apostó por Javi Bonilla en la titularidad. Igual que contra el Alcoyano, el resultado fue de empate. Una semana antes, en Cornellà, Fullana fue el titular, ya que Bonilla estaba en la gradería por sanción y, la jornada anterior, en el Nou Estadi ante el Espanyol B, el zurdo fue de la partida.

Hay que remontarse hasta el Llagostera-Nàstic de la vigésima jornada para poder ver juntos en acción a Bonilla y a Fullana. Ahora bien, estuvo en un partido en el cual el Nàstic salió a jugar con un 4-4-2 y en el cual estos dos jugadores hacían la tarea de extremos. Seligrat intentó poblar la medular, pero el resultado fue una derrota. Tirando atrás en el tiempo, Bonilla fue el titular en el Nàstic-Lleida, también en l'Hospitalet-Nàstic (Fullana estaba lesionado), así como en Andorra.

El último partido en el cual Toni Seligrat apostó para el 4-3-3 y salió con los dos jugadores de inicio fue el de la decimoquinta jornada, disputada en casa contra el Prat y que acabó con empate a un gol. Habrá que ver qué centro del campo utilizará Seligrat en el partido de este domingo, cuando el Nàstic recibirá la visita del Nàstic en el Nou Estadi a partir de las doce del mediodía.