Olimpismo
Dos catalanes, escogidos para ser los abanderados de España en la inauguración de los Juegos de Tokio
Saúl Craviotto y Mireia Belmonte serán los escarregats de abrir el paso de la delegación española
El Comité Olímpico Español (COE) ha anunciado este miércoles que el piragüista Saúl Craviotto y la nadadora Mireia Belmonte serán los abanderados de España en la ceremonia inaugural de los Juegos Olímpicos de Tokio, que tendrá lugar el 23 de julio.
Tanto Craviotto (dos oros, una plata y un bronce) como Belmonte (un oro, dos platas y un bronce) tienen cuatro medallas olímpicas. Será la primera vez que la delegación española cuenta con dos abanderados en una ceremonia olímpica y entre los dos cogerán al testigo de Rafa Nadal, portador de la bandera a la ceremonia inaugural de Río 2016.
Saúl Craviotto (Lleida, 3/11/1984) se proclamó campeón olímpico de K2 500 en sus primeros Juegos, los de Pekín 2008, al lado de Carlos Pérez.
Cuatro años después, en Londres 2012, fue plata en el K1 200. En Río 2016 sumó dos metales más, oro en K2 200 con Cristian Toro y bronce en K1 200.
En Tokio, formará parte del K4 500 al lado de Marcus Cooper Walz, Carlos Arévalo y Rodrigo Germade. El K4 español es subcampeón del mundo, por lo cual Craviotto es candidato a sumar una medalla más a la capital japonesa.
Mireia Belmonte (Badalona, 10/11/90) debutó como olímpica en Pekín 2008 con sólo 17 años. Sus primeras medallas, dos, llegaron a Londres 2012, sendas platas en 200 m mariposa y 800 m libre.
En Río 2016, cumplió su sueño de ser campeona olímpica con su victoria en el doble hectómetro de mariposa. También fue bronce en los 400 m estilos.
Para Tokio 2020, está clasificada de momento para los 800 y los 1.500 m libre.
El COI cambió este año sus reglas para obligar al hecho a que en todos los equipos olímpicos haya al menos un hombre y una mujer y para «animar» a todos los comités olímpicos nacionales al hecho que nombren a un deportista de cada sexo para llevar la bandera de manera conjunta en la ceremonia inaugural. Así, dijo, se enviaría «un fuerte mensaje a favor de la igualdad de género».
España sólo ha tenido hasta ahora dos abanderadas: Cristina de Borbó (vela) en Seúl 1988 e Isabel Fernández (judo) en Atenas 2004.