Javier Bonilla es el suplente más utilizado del Nàstic de Raúl Agné

El Gimnàsticde Tarragona de Raúl Agné no es precisamente un equipo reconocido por la cantidad de cambios que hace durante los partidos. Desde hace ya tres temporadas, los equipos pueden realizar un total de cinco sustituciones durante los enfrentamientos, pero sólo deteniendo el juego tres veces. Estos cinco cambios permiten refrescar la mitad del once y, en muchas ocasiones, ayudan a cambiar la dinámica de los partidos. Pero hay técnicos que no les gusta abusar de esta nueva mecánica, entre ellos, Raúl Agné.

El técnico de Mequinenza ya mencionó a inicios de esta temporada que realizaría los cinco cambios sólo cuando el equipo realmente los necesite, normalmente cuando el equipo ha ido perdiendo. Hay veces que el técnico considera que el equipo no los necesita y otros sólo unos retoques, pero el jugador por excelencia que sale del banquillo pase lo que pase es Javi Bonilla, el revulsivo de lujo de Raúl Agné.

Bonilla ha jugado todos los partidos de la temporada, cinco como a titular y trece desde el banquillo, acumulando un total de 704 minutos. El soriano ha perdido peso con respecto a lo que jugó la temporada pasada, cuando Seligrat lo reconvirtió en medio del campo, donde se vio habitualmente en los onzes. El soriano es un jugador versátil, puede ocupar el lateral izquierdo, ya sea por tareas defensivas si el equipo las necesita, como ofensivas, convirtiéndose en un puñal por banda con el objetivo de colgar pelotas en el área. Esta es una de sus virtudes, la calidad a la hora de colgar pelotas. Si el equipo necesita jugadas de estrategia, Bonilla es el encargado de colocarlas con precisión. El soriano también puede jugar en medio del campo, lo que lo convierte en el comodín perfecto de Raúl Agné.

Si juega el Nàstic, se tiene que tener claro que también Bonilla, pero Agné también tiene otras armas. A la delantera, Edgar Hernández empezó la temporada como el atacante suplente, que salía de refuerzo a la segunda parte, pero sus dianas le dieron la titularidad siempre que las lesiones le han permitido y relegaron al banquillo a Pedro Martín. El delantero andaluz es el segundo jugador que más ha entrado desde el banquillo esta temporada, aunque sólo ha disputado dos de los últimos cinco partidos. Martín empezó como titular, pero una vez a la suplencia, ha entrado en el terreno de juego cuando el Nàstic estaba desesperado por un gol, hito que todavía no ha conseguido él tampoco esta temporada. Y se que la delantera es una posición muy competida y, con Dani Romera a la titularidad, podría ser Fran Carbià el nuevo cambio frecuente grana.

El resto de sustituciones que hace Raúl Agné son más repartidas. Nil Jiménez, que llegó al equipo este verano, es el siguiente a la lista con seis enfrentamientos desde el banquillo, acumulando 132 minutos. El jugador entra cuando Agné necesita profundidad por banda izquierda o cuando quiere darle un merecido descanso a Joan Oriol. Lo pudieron ver contra el Albacete, aunque no pudo disputar muchas pelotas. De la misma manera que Pol Prats, ha disputado siete partidos, todos desde el banquillo, pero sólo suma 55 minutos. El tortosino sale como último recurso o cuando el técnico necesita ganar tiempo.

Los cambios son determinantes durante los partidos y, a pesar de no ser titular, Javi Bonilla se ha ganado la confianza de Raúl Agné, convirtiéndose en el jugador necesario para desbloquear los partidos.