El Nàstic buscará la primera victoria del año en el Nou Estadi contra la Andorra

El Gimnàsticde Tarragona arranca hoy la segunda vuelta tres días después del empate en el Municipal de la Línea contra el Linense. Los de Raúl Agné reciben hoy en la Andorra de Eder Sarabia en el Nou Estadi en busca de la primera victoria de este 2022. El problema está más que localizado: el gol. Los dos partidos disputados este año han acabado con empate a cero y el Nàstic demuestra tanto su punto fuerte como el débil. En el ámbito defensivo, es el mejor equipo del grupo con sólo quince goles encajados, pero al mismo tiempo es el cuarto peor atacante con quince dianas.

El fortín grana se ha mostrado esta temporada como uno de los campos más complicados a batir para todos los rivales de la categoría y hoy se espera que sea el momento ideal para volver a sonreír. La Andorra no es un equipo nada fácil, es el tercero clasificado de la categoría con treinta y dos puntos y su superioridad en la tabla no es casualidad. Los andorranos son el segundo equipo de la categoría con mayor potencial ofensivo, con un total de treinta goles. Esta calidad de los rivales pondrá a prueba la capacidad defensiva de los grana.

No se tiene que olvidar de que la Andorra batió los grana durante el partido de la primera vuelta. Los de Raúl Agné se encontraban en el momento más dulce, con pleno de victorias en casa y enganchados a la parte alta de la clasificación, pero la visita a su estadio dejó un partido donde los locales fueron claramente superiores y ganaron con uno fácil 2-0. Sin embargo, los de Eder Sarabia se encuentran este 2022 en la misma situación que el Nàstic, tampoco han conseguido ganar y llegan con una racha negativa de una derrota y un empate.

El potencial ofensivo de los andorranos está bastante dividido entre toda la plantilla, pero Carlos Martínezes el máximo goleador con seis dianas, seguido de Marc Fernández y Héctor Hevel. Este último fue uno de los jugadores que marcaron durante el duelo de la primera vuelta.

La Andorra presenta un juego de toque donde buscan superar a su rival a través de las superioridades individuales durante los partidos, con buen potencial por las dos bandas, donde sus carrilers y extremos resultan especialmente peligrosos. Los de Eder Sarabia son un equipo muy peligroso si el Nàstic baja la guardia. Si su rival permite que se apoderen del control de la pelota, pueden romper el partido en cuestión de según. El Linense, el anterior rival del Nàstic, lo probó de primera mano cuándo en diciembre perdió por 7-1 en el Estadio Nacional de Andorra.

Si los andorranos tienen un punto débil, es que los partidos como visitante no son su punto fuerte. Esta temporada tienen un balance negativo de cuatro derrotas, tres empates y sólo dos victorias. Este problema parece la tónica general de la categoría, pero el Nàstic lo tiene acentuado.

Para este enfrentamiento Raúl Agné recuperará a Ribelles, que vuelve después de su sanción y no podrá contar con Jannick Buyla, que hoy juega su enfrentamiento de octavos de final de la Copa África contra Malí a las 20.00 horas. Tampoco estará disponible Edgar Hernández, que continúa en fase de recuperación, ni Carlos Albarrán, que se hizo daño el pasado domingo y se está estudiando el alcance de su lesión.