«Mi sueño es triunfar en el Nàstic y espero seguir muchos años»

— Este año ha jugado más minutos que durante la temporada pasada. ¿Cómo se siente con el paso adelante?

— Me lo he tenido que ganar con mucho trabajo. Estoy muy contento de haberlo conseguido porque era un reto que tenía al inicio de temporada.

— Lo ha hecho más en el lateral derecho que como central, su posición. ¿Cómo encuentra el cambio?.

— Me he tenido que adaptar a esta posición. Para tener minutos en esta categoría y con el Nàstic, me he tenido que acostumbrar a la banda y coger galones para hacerme valer como futbolista.

— De hecho, a la defensa está donde hay más competencia. ¿Cómo lo vive el vestuario?

— Es necesario. La competencia es muy buena para un equipo y sabes que aquí, si te despistas un poquito, un compañero te puede coger la posición. En este equipo la defensa está bien trabajada y hay muy buenos jugadores.

— ¿Cree que por fin se ha ganado un lugar en el once inicial?

— En este equipo todos somos titulares. Cualquiera que juegue puede hacerlo igual o mejor que el resto, así que no me considero titular sino un jugador de equipo más, pero estoy contento de los minutos que disfruto.

— Prefiere estar en el lateral o en el eje de la defensa?

— Si digo la verdad, este año me está yendo muy bien de lateral así que no sabría decir. Me he adaptado bien y estoy muy a gusto en la banda, pero me siento cómodo en las dos posiciones.

— Como lateral su presencia ofensiva es más importante. ¿Cómo se coordina con su compañero de banda, Robert Simón?

— Al principio me costó un poquito porque vendía jugar toda la vida de central, una posición que no se necesita tanto ofensivamente. En el lateral la diferencia se nota en el recorrido, la profundidad, los cambios de ritmo y de dirección constantes durante el partido. Al final, me he adaptado a tirar hacia arriba por la banda y, de momento, nos va un poco bien en los dos. Hemos mejorado y eso se refleja en los partidos, como contra el Algeciras.

— Esta temporada ha vivido momentos de rachas negativas y positivas, como lo ha vivido desde el vestuario?

— Sabíamos que la mala dinámica se iba a acabar porque estábamos trabajando muy bien. Estas dinámicas aparecen y se marchan, y al final hemos conseguido acabarla. Ahora, sin embargo, no tenemos que relajarnos y tenemos que continuar la línea de los últimos partidos.

— Contra el Algeciras se dieron las circunstancias y tuvo la oportunidad de lucir el brazalete de capitán. ¿Qué pensó?

— Para mí es un orgullo. Mi sueño desde que era pequeñín y vine a jugar al Nàstic era conseguir llegar al primer equipo. Llevar el brazalete de capitán es un orgullo para mí, para mi familia y estoy muy contento de haberlo conseguido.

— Tiene el Nàstic un capitán para muchos años con Pol Domingo?

— Esperamos que sí, siempre he dicho que mi sueño es triunfar aquí, en la ciudad de Tarragona y en el club de mi vida. Espero seguir muchos años por aquí.

— Llegó al Nàstic a las categorías inferiores y ahora está en el primer equipo. ¿Cómo ha sido esta trayectoria?

— En general he sido muy feliz. He vivido grandes momentos y otros negativos, pero me quedo con los positivos. Me conozco bien el club, pienso que hace 14 años que estoy en la casa. Ha sido un cambio difícil donde he trabajado mucho y este esfuerzo, al final, ha tenido su recompensa.

— Qué le diría a los jugadores de las categorías inferiores que también tengan este sueño?

— Que sean conscientes de que es muy difícil, pero que no se rindan. Todo es posible con trabajo y voluntad, pero también es necesario mucho sacrificio. Para ser futbolista profesional se tienen que sacrificar muchas cosas, pero con esfuerzo pueden conseguir su sueño.

— La afición letiene en alta estima.

— Lo he notado mucho desde el día que debuté. La gente valora mucho a los de casa, nos quieren y nos dan fuerza para que nos vaya bien. Eso se agradece muchísimo y les doy las gracias por todo el apoyo que nos han dado hasta ahora.

— Con Agné, el equipo ha mejorado muy defensivamente. ¿Qué destacaría desde que se encuentra bajo su mando?

— El míster nos hace estar muy concentrados. No nos tenemos que despistar en ningún momento, tenemos que estar atentos a cualquier cosa que pueda pasar. Nos hemos esforzado mucho por mejorar este aspecto y eso se ve reflejado cada jornada con el alto nivel que demostramos y con la alta competencia entre los defensores.

— Al final del partido contra el Baleares, Agné mencionó que el vestuario tenía la sensación de haber perdido dos puntos. ¿Cómo manejáis esta presión para ganar?

— Teníamos el partido donde queríamos y te marchas un poco tocado porque en un campo tan complicado, vas ganando y en el minuto 80 se te escapan los puntos por una jugada de estrategia... Al final, tenemos que mirar la racha de tres victorias y un empate en cuatro partidos, es una buena dinámica.

— Estas últimas semanas habéis jugado contra rivales directos y ahora os tocan tres consecutivos, a priori, más asequibles que el Atlético Baleares.

— Todos los equipos de esta categoría son muy fuertes y capaces de competir los partidos. No nos podemos relajar, los tenemos que coger de la misma manera que el resto de partidos porque si nos despistamos, podemos recibir goles y perder puntos en cualquier partido.