«Si nos aplicamos al mejorar en ataque, jugaremos el 'play-off' seguro»

— De suplente a imprescindible. ¿Cómo se siente con este cambio radical?

— Cuándo el equipo está en una buena dinámica se tiene que entender que la competitividad es máxima, tienes que esperar tu momento e intentar aprovecharlo. ¿Cómo hacerlo? Entrenando cada día bien para estar preparado y poder dar continuidad a la oportunidad. Cada partido que juego lo hago al máximo, pueden ser mejores o peores. Estoy teniendo suerte y me están saliendo las cosas bien, tengo que continuar así por completar los objetivos del equipo.

— Esta temporada ha marcado su primer gol, fue contra el Barça B. ¿Cómo se sintió?

— En aquel momento te pasan muchas cosas por la cabeza. El primero que sentí fue mucha rabia, era un momento importante, sabiendo que suponía el 0-2 y que a nosotros es muy difícil que nos hagan goles. Además, había viajado mucha gente y mi pareja también estaba. Fue muy bonito, inolvidable, pero no me valdrá para nada si al final no alcanzamos el objetivo.

— El gol precisamente es una de las tareas pendientes del equipo. ¿Cree que por este motivo se exige todavía más a la defensa no fallar?

— Creo que no tiene nada que ver. Defensivamente, somos un bloque muy sólido, pero si que ofensivamente nos tenemos que aplicar más. Es una cosa del equipo, nos sentimos más cómodas defendiendo que atacante, y hacerlo tan bien es una virtud que no depende solamente de los defensas, sino de todos. Nos tenemos que concienciar de que ofensivamente los números son lo que son. Siendo realistas, son pobres, pero si nos aplicamos en esta tarea, el play-off, lo jugaremos seguro.

— Después de una buena racha ha llegado otra con cuatro partidos sin ganar. ¿Cómo se vive desde el vestuario sabiendo que ya se ha vivido altibajos esta temporada?

— Es un momento de estar muy juntos, quedan ocho finales, cuatro en casa y es el momento de la verdad, lo que estábamos esperando. Es verdad que hace cuatro semanas que no ganamos, pero tenemos que ser optimistas. Estamos en un punto y esta es la realidad, lo que nos toca. Sabemos que el partido del domingo es una auténtica final y tenemos que ganar sea como sea.

— Este domingo el Nàstic juega contra el Castellón, el equipo donde creció y estuvo capitán.

— Será un partido muy especial para mí. Soy de Castellón, he estado diez años allí, pero desde que estuve han cambiado muchas cosas. Yo viví la parte peor y ahora es otra cosa. Para mí no será un partido más.

— Conserva unos cuantos amigos por allí.

— Sí, guardo amigos tanto en el club como en el césped. Al final, me he criado y he vivido allí muchos años, pero eso durante el partido no vale para nada. Yo miro por el Nàstic y ellos por el Castellón. Quiero lo mejor para mí que soy llevarse los tres puntos.

— Cómo tiene que salir el Nàstic este domingo?

— Como mínimo, con mucha intensidad. Si no vamos al cien por cien, estaremos muy lejos de ganar. Tenemos que tener la intensidad y la agresividad defensiva que nos caracteriza y que hemos demostrado. Si conservamos la portería a cero, estaremos, casi seguro, cerca de ganar. Aparte, tenemos que ser más aplicados ofensivamente. Con eso, podemos ganar un partido contra un rival que está más o menos como nosotros, pero el Nàstic tiene el beneficio de jugar en casa ante su afición.

— Hablaba de intensidad. ¿Se exige mucho Marc Trilles a sí mismo?

— Sí. Esta exigencia me hace ir al límite muchas veces, pero yo tengo que ir así. Si no lo hiciera, posiblemente no estaría jugando con el Nàstic y no podría haber vivido el que hasta ahora. Al final, me considero una persona muy competitiva y muy exigente, tanto conmigo mismo como con mis compañeros. Miro por el equipo, cambia mucho afrontar una semana habiendo ganado que después de perder y quiero que tanto el equipo como la afición sea feliz y la mejor forma de conseguirlo es esforzándose y ganar.

— Todos los equipos de la parte alta están pinchando, eso da la sensación que, poco a poco, se está poniendo más difícil y se tiene que aprovechar.

— Es un grupo muy competitivo que no tiene nada que ver con el otro de Primera RFEF. Es verdad que en el grupo 1 hay equipos muy potentes, pero en este la igualdad es máxima y la diferencia estará a aguantar hasta el final. Lo que manda es la regularidad. Ahora quizás se dice que tenemos una mala racha porque sumamos cuatro semanas sin ganar, pero estamos a un punto y, al final, parece peor de lo que es. Yo veo que cada vez se hace más difícil ganar porque está todo muy igualado. Es verdad que en los últimos partidos en casa no hemos sido finos, yo diría que esta es la palabra, pero es así la competición y hay mucha igualdad, pero el premio es muy grande: jugar el play-off y ascender a Segunda. Lo que no esté preparado no vale para este deporte. Ahora tenemos una oportunidad única y maravillosa y lo tenemos que aprovechar.

— Esta temporada se acaba su contrato con el Nàstic. ¿Piensa en jugar aquí una más?

— Eso no depende de mí. Estoy muy a gusto aquí en Tarragona y ojalá esté mucho tiempo, pero no sólo depende de mí. No tengo prisa, lo hablaremos cuando toque, no es un tema que me preocupa porque tengo muy buena relación con el club.