«Para mejorar en el gol se tiene que equilibrar el aspecto físico y mental»

—Cómo se siente en Tarragona meses después de su llegada?

—Muy contento. En general, estoy muy feliz en la ciudad y, sobre todo, jugando en el club a que me ha abierto las puertas. También quiero agradecer en todo el vestuario que siempre me han dado apoyo y eso se suma a la buena dinámica general que estamos teniendo.

—En el Nàstic ha tenido una evolución ascendente, de tener pocas oportunidades a marcar y sumar dos titularidades consecutivas. ¿Cómo siente esta nueva dinámica?

—Disfruto del día a día, estoy muy contento de poder jugar y también de poder dedicarme al fútbol profesionalmente. La evolución está ligada con la dinámica positiva que tiene el equipo tan dentro del campo como fuera.

—Qué pensó del toque de atención que recibió de Raúl Agné sobre su peso?

—Decidí tomármelo como una motivación para corregir la posición en que estaba. En aquel momento no podía tener la regularidad que yo quería. A partir de este punto, era cuestión de trabajar en mí mismo para conseguir aportar mi mejor versión al equipo.

—Marcó el primer gol con la camiseta grana contra el Castellón, fue una liberación?

—Disfruté mucho de poder marcar mi primer gol con la camiseta del Nàstic y también para ayudar en el equipo. Fue un gol muy especial para mí.

—Lo celebró con mucha euforia.

—Los goles siempre son motivo de alegría y este en particular se podría llamar que fue una especie de liberación.

—El día contra el San Fernando hubo muchas ocasiones, pero la pelota no quiso entrar. Incluso tuvo una que no llegó a rematar por milímetros. ¿Cómo se vive desde el césped?

—Es un poco frustrante, sobre todo porque el equipo hizo a un partido muy completo, pero tener tantas posibilidades y después no poder sumar los tres puntos a nuestro estadio es complicado de gestionar. Nos quedamos con las buenas sensaciones, a partir de ahora tenemos que seguir trabajando en esta línea y, de esta manera, los resultados llegarán.

—Y cómo lo vivió desde el banquillo cuando lo sustituyeron?

—Totalmente diferente. Vivirlo desde fuera es mucho peor sin lugar a dudas. Eso lo saben bien los aficionados, el cuerpo técnico y el presidente. Al final, sobre el césped todo recae sobre tu responsabilidad y estás concentrado al dar lo mejor de ti mismo en el partido, pero desde fuera se sufre mucho más, eso seguro.

—Cuando pasan situaciones de este tipo siempre se centra más la atención sobre los delanteros. ¿Cómo se gestiona esta presión extra?

—Nosotros, los delanteros, somos una parte más del conjunto y creo que no podemos ponernos esta presión encima. Somos uno más y desde nuestra posición tenemos que aportar lo que mejor sabemos para que el equipo sume los tres puntos. Tenemos que ayudar a conseguir el objetivo establecido, por eso estamos aquí, pero intento no obsesionarme más de la cuenta con el gol. El hecho de marcar goles se tiene que vivir con naturalidad porque, si no, podría ser contraproducente.

—Cómo se hace para mejorar en el aspecto del gol?

—Se tiene que hacer un trabajo conjunto. Creo que se tiene que tratar psicológicamente, físicamente, tácticamente y técnicamente todo de forma complementaria. Además, también se tiene que hacer el entrenamiento invisible, que es poder cuidarte de la mejor manera cuando no estás entrenando para poder rendir al cien por cien una vez pisas el césped. Se tienen que controlar todos los aspectos y los detalles para encontrar un equilibrio físico y mental.

—El próximo partido está este domingo en casa del Sabadell, un rival directo a la clasificación. ¿Cómo se prepara un partido de tan alta presión?

—Es evidente que se trata de un partido muy importante para nuestros objetivos, necesitamos sumar los tres puntos sea como sea así que tenemos que salir con la mentalidad de ir a ganar, ir a por los tres puntos. Sin embargo, considero que esta segunda vuelta que estamos teniendo es positiva. Es verdad que los últimos partidos que hemos jugado no hemos encontrado una dinámica de victorias tan regular como nos gustaría, pero sólo hemos perdido dos partidos en esta segunda vuelta, es cuestión de poner en perspectiva los resultados y saber que estamos haciendo las cosas bien. Seguiremos trabajando en la misma línea para conseguir sumar de nuevo tres puntos.

—Llega a Tarragona en calidad de cedido procedente del Espanyol después de pasar una primera parte de la temporada en la Ponferradina con pocas oportunidades y ahora, al Nàstic, las está encontrando. ¿Cómo lo sirve este año a tu carrera?

—Está siendo un año de mucho crecimiento para mí, sobre todo en el ámbito personal. Todo eso que me ha tocado vivir esta temporada pienso incorporarlo a mi carrera para poder seguir disfrutando del día a día. Muchas veces llegamos al punto de normalizar el hecho de poder dedicarnos al fútbol profesionalmente, vivir de eso es un privilegio. De alguna manera, las experiencias que he vivido durante todo este año me han permitido darle un nuevo significado a mi carrera.