El Gimnàstic de Tarragona de la temporada 2022-2023 comienza este lunes

El Nàstic de Tarragona de la temporada 2022-2023 se empieza a poner en marcha hoy en los despachos con la reunión del Consejo de Administración. En este esperado encuentro se hará el balance de la última temporada y también será la primera semilla del nuevo proyecto del Nàstic de cara a la próxima temporada. Los grana buscarán ascender a Segunda División de una vez por todas después de sumar cuatro temporadas, contando la de este año, a la categoría de bronce del fútbol español.

Sobre la mesa hay diversas grandes decisiones de diferente índole. Primero, la continuidad, o no, de Josep Maria Andreu a la presidencia del Gimnàsticde Tarragona SAD, después la del director deportivo, Sergi Parés, que acaba contrato de aquí diez días y, en la parte más deportiva, la posición de entrenador y la plantilla escogida.

Para buscar de nuevo el ascenso, la respuesta común sería la de conservar el bloque de este Nàstic, pero el amo de estas decisiones dependen de las personas implicadas. Josep Maria Andreu comunicará a la junta su resolución hoy, de la misma manera que Raül Agné tendrá que tomar una decisión esta semana para empezar a trabajar. Sergi Parés, el director deportivo, está muy cerca de firmar una renovación con el equipo con que ha sido vinculado durante los últimos tres años. Con estas novedades se tendría que confirmar la ampliación de capital de dos millones de euros que pronosticó el presidente del Nàstic la última junta de socios en caso de no ascender de categoría.

El Nàstic acabó la temporada más tarde que muchos de sus competidores, así que tendrá que ponerse manos en la obra para empezar a construir un nuevo proyecto para el ascenso. Teniendo en cuenta la última campaña, el inicio de la pretemporada tendría que iniciarse en menos de un mes, así que los engranajes tendrán que empezar a funcionar.

Un deseo abierto tanto de Sergi Parés como del resto de aficionados del Nàstic es la de mantener el bloque de jugadores que llevó el equipo hasta la última puerta del fútbol profesional. Aunque los jugadores que acaban contrato a finales de junio tocan todos los puntos de la columna vertebral grana, el trabajo prioritario es prestar atención en la parte más afectada y la más importante de la temporada: la defensa. Trilles, Quintanilla y Joan Oriol han sido las piezas fundamentales que crearon el famoso muro grana que dio al Nàstic el aire de una fortaleza infranqueable. En estos tres se les suma el caso de la portería, Manu Garcia también acaba contrato, de la misma manera que Gonzi.

El trabajo en las negociaciones ya ha empezado y es un primer paso necesario por evitar que el resto de aspirantes a ascender vean en el Nàstic como una buena zona donde pescar jugadores. La apuesta por el ascenso, en las condiciones económicas actuales, sigue la línea de mantener el bloque y reforzar los puntos que Raül Agné crea necesarios para su nueva plantilla.