Los delanteros del Nàstic empiezan con fuerza a falta de una nueva incorporación

El Nàstic de Tarragona inició la temporada de la mejor manera, con victoria en los penaltis y sobre todo, con una declaración de intenciones de haber solucionado el eterno problema del año pasado con el gol. Dos de los tres jugadores de esta parcela del equipo se estrenaron contra el Real Zaragoza. Andrei Lupu y Àlex López no hicieron esperar a los nastiquers y marcaron en la primera parte del partido y, de esta manera, han presentado su candidatura a hombre gol. El gol y el conjunto de Raül Agné fue un quebradero de cabeza durante la última campaña y no es ningún secreto que desde la directiva aplican el 100% de sus esfuerzos en fichar a un delantero de renombre que sea la referencia del equipo. El técnico de Mequinenza quiere un «animal, un hombre que corra y gane a los defensas en situaciones 1 contra 1» y estas características, día tras día, o se hacen más caras o más difíciles de encontrar.

La delantera se ha convertido en el serial del verano en la Budallera. Se han acercado a Tarragona nombres como Vinícius Tanque, Dani Romera y se mantiene la opción de Mourad, pero está claro que no será fácil y que todavía se trabaja con varias opciones en este momento. Mientras que la dirección deportiva sigue trabajando sin descanso desde las oficinas, los jugadores del Nàstic empiezan a hacerlo sobre el césped ante su afición. El pasado viernes se pudo ver durante la primera mitad que el gol podría no ser un problema la próxima temporada.

Agné alineó a la pareja de Àlex López y Andrei Lupu y los dos destacaron con un gol. El calafellense todavía se encuentra a prueba con el Nàstic. Antes del partido, su figura ya gustaba a la entidad y, después del partido que cuajó con el gol como guinda del pastel, se podría haber ganado un sitio enla delantera. Àlex López no sólo destacó por el gol, sino que también tocó aquellas notas que tanto le gustan al técnico de Mequinenza: bajar pelotas y dar continuidad al juego.

Con respecto a Andrei Lupu, el delantero estaba haciendo un trabajo muy distraído, pero destacó en lo que tenía que hacer, el gol, y la única acción del partido que brilló fue el remate acrobático en el centro de Albarrán. La característica de poder marcar incluso en días donde no se encuentra el buen juego, es muy importante para cualquier delantero, no está de más recordar que al legendario delantero Raúl González Blanco le decían «el que nunca hace nada», pero siempre marcaba.

La única nota negativa de la delantera fue que Pablo Fernández tuvo que ser sustituido por un golpe. Los delanteros grana tendrán una nueva oportunidad de mostrar su capacidad goleadora mañana contra la SD Huesca.