La invencibilidad del Nàstic d'Agné en el Nou Estadi se rompe muy pronto

El Nàstic de Tarragona ha empezado la temporada con el pie izquierdo. Eso lo marcan los números: los grana han sumado dos de los nuevos puntos posibles. La derrota contra el Intercity del pasado sábado no sólo significó un mal comienzo a la liga, sino que también significó la quiebra de uno de los baluartes que tantas alegrías dio en el equipo la última temporada.

Los de Raül Agné certificaron la primera derrota de la temporada en el Nou EstadiCosta Daurada después de un partido donde los locales brillaron los primeros quince minutos, pero esta imagen se hizo añicos en cuestión de según por culpa de la fragilidad defensiva que desprende el equipo.

La última temporada el Nàstic completó los tres primeros duelos con un empate a domicilio y dos victorias en casa. Este fue el inicio de un récord. Los grana ganaron los cinco primeros enfrentamientos en casa y lo que fallaba era sumar tres puntos fuera. La primera derrota en el estadio no llegó hasta la jornada 14 contra el Atlético Baleares. Esta temporada, la primera derrota en casa ha llegado muy pronto.

Los cambios también se vieron a nivel de juego. Durante los primeros quince minutos de partido contra el Intercity se pudo ver a la perfección que la idea del fútbol directo y cerrarse en defensa había desaparecido. Con Pablo Fernández en el banquillo, los grana brillaron en el fútbol asociativo con Montes, Montalvo y Aarón Rey como segunda punta, pero eso no duró mucho. El Nàstic tomó de su medicina cuando el Intercity, en dos ocasiones puso el partido muy a favor suyo y, de hecho, antes de llegar al descanso la diferencia se podría haber ampliado con dos más.

Hasta ahora, el equipo había mostrado una capacidad de reaccionar ante los goles contrarios con efectividad. Contra la UD Logroñés se repusieron, aunque después se dejaron empatar, y contra la Nucía encontraron su mejor momento en el tramo final del partido. Este sábado, sin embargo, los dos goles en cuestión de cinco minutos afectaron anímicamente en el equipo y levantaron se complicó. Según Agné, fue uno de los mejores partidos del Nàstic entre áreas, pero también reconoció la falta de efectividad en estas es lo que ha marcado el mal inicio.

El Nàstic necesita la primera victoria pronto y eso significa tener que romper de nuevo con la temporada pasada. El Nàstic tiene que ganar lejos del Nou Estadi, cosa que el año pasado no se vio hasta la segunda vuelta.