El Nàstic mejora en defensa, pero se olvida del ataque (0-0)

El Nàstic de Tarragona no consiguió mover el marcador y empata a cero contra el Bilbao Athletic en un partido muy trabajado en defensa por parte de los grana. Los de Raül Agné presentaron un partido muy sólido en defensa, pero no aprovecharon ninguna oportunidad para perforar la portería rival. Los grana se marchan con una nueva portería a cero y con el segundo partido fuera de casa sin perder.

Raül Agné mostró unas pequeñas modificaciones en todas las demarcaciones. Pablo Fernández volvió al lado de Guillermo al ataque y Andy Escudero recuperaba la titularidad para sustituir a un lesionado Aarón Rey. El jugador de Alicante volvió después de una larga ausencia sobre el césped. A la defensa, el cambio que más ha sorprendido no ha sido la entrada de Quintanilla al lado de Josema, sino que Pol Domingo le ha birlado el lateral derecho a Tirlea.

La primera parte ha empezado con una declaración de intenciones. Tanto Bilbao Athletic como el Nàstic se intercambiaban la posesión a pilotada. El juego directo mandaba y el partido cogía velocidad de una banda y otra. El Nàstic fue el primero a ver puerta con un chute desde la frontal de Pablo, uno de los jugadores más activos sobre el césped. El Bilbao Athletic ganaba la posesión con el paso de los minutos, pero el Nàstic mostró un carácter bien diferente del de la semana pasada. Los grana salieron a morder a los leones con una línea de presión a la salida de la pelota. En esta acción los grana forzaron el error rival y Andy Escudero tuvo de su mano lo que podría haber sido el 0-1, pero el chute desde la frontal del área salió por encima de la portería de Padilla.

El Nàstic empezaba a verse cómodo y Joan Oriol salió al contraataque para brindar a Andy la ocasión más clara de la primera parte. El alicantino no pudo rematar con comodidad en el área pequeña y Padilla se la paró. El Bilbao Athletic no se quedaba corto y a base de jugadas en pelota parada conseguía acercarse al área grana. La más clara del filial vasco y también de toda la primera mitad la tuvo Adu Ares. El extremo vasco posicionó en la frontal del área y remató con uno dispar colocado que buscaba limpiar las telarañas de la escuadra de la portería. Manu García voló, pero el chute estaba bien realizado y el portero no llegó a tocar la pelota. El Nàstic tuvo suerte y la trayectoria de la pelota chocó con el palo para después salir fuera.

Los de Raül Agné se repusieron. Esta primera parte no la regalaron y en el tramo final antes del descanso cogieron la iniciativa. Los grana tuvieron dos ocasiones claras. La primera con una centrada al segundo palo que nadie pudo rematar y a la posterior jugada Pol Domingo centró en el área y Pablo se encontraba muy bien posicionado para el remate, pero un defensa le birló la pelota antes de que le llegara el esférico.

El partido llegó al descanso con empate a cero, la más clara la tuvo el Bilbao Athletic, pero el Nàstic se mostró más activo que la última semana.

Alguna cosa vio a Raül Agné que no le gustó del equipo porque al inicio de la segunda mitad dejó al banquillo a Montalvo y a Marc Álvarez para dar entrada a Montes Arce y a Nil como extremo izquierdo.

El Nàstic ganó en control de la pelota y la primera ocasión no tardó a llegar. Nil Jiménez dribló por la izquierda en su marca, el defensor quedó plantado en el suelo y la extrema grana la centró en el área. Pablo la cogió y, a pesar de acomodarse la pilota para el remate, no encontró el agujero y la cedió a Guillermo. Este tampoco supo rematar, la jugada se alargaba y finalmente polo Domingo llegó desde segunda línea para chutar a puerta. El esférico lo rehusó un defensor y se marchó a servicio de lado. A la siguiente jugada, la pelota llegó a Guillemó y el delantero vasco, a la media vuelta, remató entre los tres palos y Padilla la envió a córner.

Con el paso de los minutos, el Bilbao Athletic ganó en intensidad y tuvo las mejores ocasiones. En un contraataque, Quintanilla resbaló y Adu Ares puso a prueba a Manu García que, atento, se la paró. La jugada continuaba y el centro posterior al área lo remataba Gerenabarrena con un gran salto, pero la pelota salió fuera.

El partido se hizo largo y el Nàstic lo trabajaba para evitar que el filial vasco se adelantara. Los minutos pasaban y nadie conseguía mover el marcador. De esta manera acabó el partido, de la misma manera que empezó, con un cero a cero. A diferencia de la semana pasada, el Nàstic se mostró más proactivo, pero también le faltaron los goles.