El Nàstic cierra la segunda victoria seguida con sufrimiento (2-3)

El Nàstic de Tarragona consigue una nueva victoria a domicilio con mucho sufrimiento. El partido no parecía que acabaría con los grana pidiendo la hora. Los de Raül Agné cuajaron un gran primer tiempo donde se mostraron rápidos, incisivos y contundentes, con un destacado Andy Escudero, pero en la segunda parte el equipo mostró una cara más oscura, pero supieron cerrando la victoria.

Raül Agné decidió mover banquillo para dar un giro en medio del campo. Gorostidi, Montes Arce y Andy Escudero salieron de titulares mientras que Montalvo, Pedro del Campo y Marc Álvarez empezaron el duelo desde el banquillo. Los grana se encuentran en un momento dulce de la temporada y lo aprovecharon.

Los grana salieron a pesar de presionaban la salida de la pelota del Real Unión con el cuchillo entre los dientes. Esta presión provocó el error del conjunto local y el Nàstic lo aprovechó. Montes Arce y Gorostidi empezaron a crear la jugada al primer toque. Andy Escudero la recibió, se la colocó y le hizo un centro milimétrico a Guillermo, que estaba en el área. El delantero del Nàstic dribló al portero rival con un toque sutil y avanzó al Nàstic en la primera jugada del partido. Los menos habituales aprovecharon su oportunidad y Andy Escudero mostró porque el Nàstic lo fichó, para estas acciones ofensivas con ojo milimétrico.

El Real Unión despertó después del gol. Los vascos intentaron reaccionar con todo lo que tenían, pero el Nàstic se mostraba tranquilo en defensa. Los grana esperaron su oportunidad y la consiguieron. Los de Raül Agné se mostraron más veloces del habitual a la hora de generar jugadas y los errores de Joel jiménez, portero del Real Unión, casi significaron el segundo. Jiménez hizo una mala salida para rehusar con la cabeza una pelota. El esférico cayó a los pies de Aarón Rey y este chutó en portería vacía desde la frontal del área, pero la mala suerte hizo que la pelota se estrellara con el palo.

Rey falló, pero el Nàstic siguió con su buena línea. El Real Unión quizás tenía más la pelota, pero el Nàstic se mostró letal. Después de varias ocasiones tanteando la zona, Andy Escudero volvió a aparecer. Por su parte volvió a marcar el Nàstic. Esta vez Escudero hizo el centro preciso hacia Aarón Rey. El gallego la atrapó al vuelo, se la acomodó y esta vez no perdonó. El chute cruzado superó a Joel Jiménez y puso el 0-2 al electrónico.

El Real Unión también tuvo las suyas. Nacho Sánchez puso a prueba a Manu García en un uno contra uno, pero el portero grana, hizo la de siempre y salvó en el Nàstic con un gran paro. En otra acción de pelota en el área, el salvador fue Pol Domingo. El lateral derecho del Nàstic se tiró en el suelo para evitar el gol con su cuerpo. Antes del descanso, Guillermo tuvo la última con un centro-chute que Pablo no consiguió rematar.

A la salida del descanso, el Nàstic mantuvo el empuje para buscar el tercero. Habría llegado por parte de Gorostidi. El mediocampista vasco hizo un gran remate desde la frontal y marcó, pero el árbitro anuló el gol porque el esférico pasó por debajo de las piernas de un jugador del Nàstic que estaba en fuera de juego.

Los grana seguían al ataque y, en una de estas, Espigaste empujó a Guillermo y el delantero del Nàstic cayó. El árbitro decidió que esta acción era suficiente para silbar penalti y Joan Oriol engañó al portero para marcar el 0-3.

El partido parecía que sería cómodo, pero el Real Unión contestó inmediatamente. En la siguiente acción del partido, Aramburu puso el centro en el área y Josema lo rehusó con la cabeza con la mala suerte que a Núñez la pilló en la frontal y con un gran chute rozando el palo marcó el 1-3. Con el paso de los minutos, el Nàstic se fue debilitando y el Real Unión se hizo grande. Las ocasiones de los vascos no paraban de llegar y el segundo vino de servicio de esquina. El centro fue al segundo palo y Manu García erró en la salida y no la pudo rehusar. Montoro la recibió en el segundo palo y marcó el 2-3 a placer.

Nadie se pensaba que después de la gran primera mitad, el Nàstic pediría la hora para ganar, pero pasó. Los grana se pusieron el traje de trabajo y tuvieron que resistir al Real Unión. Los minutos pasaban y los grana acusaban el esfuerzo. Quintanilla y Pol Domingo se veían visiblemente tocados, pero no quedaban cambios en así que el central vasco acabó de mediocampista y Montalvo, que había salido al segundo tiempo, ocupó la posición de central.

A pesar del sufrimiento, el Nàstic cerró el partido con una victoria que los mete todavía más al play-off.