«Con todos los que tengo detrás, tengo que seguir sumando para devolver la confianza»

— Como valora el último año?

— El 2022 fue un muy buen año. Empecé ganando la medalla de bronce a la prueba de Medio Maratón en los Juegos Iberoamericanos, después participé en el Campeonato de Europa en Múnich con una undécima posición y plata por equipos. Finalmente, en diciembre batí el récord de España al Maratón de Valencia. Estoy contenta porque esta última prueba fue la guinda del pastel de un gran año que me consolidó como una de las mejores maratonianas.

— Ha pasado más de un mes de la gesta de romper un récord de 27 años. ¿Cómo se siente?

— Ahora que ya ha pasado un tiempo, valoro todavía mejor haber superado una marca que había estado imbatida durante 27 años. Hacerlo pone en valor el trabajo que hago cada día. No trabajo para ser la inspiración de nadie, pero si sirve para atraer a más jóvenes en el mundo del atletismo, me alegra mucho. Cuando leo los comentarios que me dejan por las redes sociales, me sacan más de una sonrisa.

— Cuánto de tiempo llevaba detrás del récord?

— El año 2020, durante la pandemia, consensué con mi entrenador, Jordi Toda, el reto de correr a ritmo de récord de España. Inicialmente, sólo quería aguantar cuanto más kilómetros mejor con el nuevo ritmo y gestionar el temido muro del maratón. Aquel mismo año, en Valencia, me quedé a 17 segundos del récord. Fue en aquel instante cuando vi que era posible. Desde entonces, trabajé para conseguirlo y, finalmente, batí el récord en Valencia.

— ¿Qué es el muro del maratón?

— A las distancias largas, el cuerpo experimenta un cansancio diferente del de una carrera corta. Llega un momento que tu jefe te dice que ya has llegado al límite y te da el impulso de frenar, pero te tienes que saber sobreponer a la situación y continuar adelante. Es un juego entre mente y físico, por eso disfruto tanto de un maratón.

— ¿Cómo se prepara el cuerpo para esta prueba?

— Se tiene que hacer un entrenamiento diario. Tienes que practicar las tiradas largas y ritmos específicos para ir educando el cuerpo durante la duración de una carrera.

— También tiene su parte estratégica.

— Las ciudades no son planas, así que a mí me gusta estudiarme el recorrido antes de empezar. Es un pequeño ritual previo a cada competición, porque los pequeños detalles son los más importantes. Se tienen que localizar los kilómetros más duros, donde puedes correr con el viento en contra, los giros y zonas complicadas. Si tienes todo eso en la cabeza, durante la carrera no te sorprende.

— Usted es de Valls, ¿cómo ha ayudado a su ciudad en el desarrollo de su carrera?

— Mis inicios en el mundo del atletismo fueron en Barcelona, pero estuvo en el retorno a Valls con Jordi Toda cuando cogí la ambición y la pasión. Cuando entreno por Valls, cruzarme con gente que me conoce, que me anima y se alegra por mí, me ayuda a continuar adelante. Además, cuando el Ayuntamiento puso mi nombre en la pista de la ciudad también fue una alegría y motivación. Pienso que, con todos ellos detrás, tengo que seguir mejorando para devolver la confianza en que han depositado en mí.

— ¿Cuáles son los próximos retos de cara a la próxima temporada?

— En verano, se disputa el Mundial de Atletismo en Budapest. Si todo va bien, podré disputar el maratón y empezar a prepararme para el objetivo a largo plazo, que es poder competir en los Juegos Olímpicos de París 2024. Todos los caminos apuntan hacia allí.

— Sería la segunda participación después de Tokio.

— Los Juegos de Tokio fueron muy especiales, pero también porque hubo muchas restricciones por la pandemia. Estábamos aislados en un hotel y, al final, la prueba del maratón se llevó a cabo en Sapporo. Estoy encantada de haber vivido unos Juegos únicos, los guardo mucho de afecto, pero espero estar en París.

— Tiene la mínima olímpica para participar.

— Sí, pero la Federación Española todavía tiene que mostrar los criterios, si no pasa nada, estaré.