Resistencia grana en el Castalia (0-0)
El Nàstic se llevó un punto de uno de los estadios más difíciles de la categoría en uno de los mejores partidos defensivos de la temporada
El Nàstic de Tarragona sobrevivió a las acometidas del Castellón en el Nuevo Castalia y se llevó un punto importante de uno de los mejores estadios de la categoría. Los grana resistieron durante todo el parido en el cual ha estado, de lejos, el mejor partido en fase defensiva de la temporada. Por otra parte, los grana renunciaron el aspecto ofensivo a la segunda mitad y acabaron sellando un empate que los deja a diez puntos de la parte alta y a cinco del descenso.
El partido empezó accidentado. En la primera acción, Lupu y Manu Sánchez saltaron para interceptar el esférico y acabaron chocando los dos con el cap. El delantero grana hace unas semanas sufrió un traumatismo craneoencefálico y salió más maltrecho de la acción, pero continuó unos minutos más. El partido se presentaba difícil contra un rival casi imbatido en su estadio y, a los pocos minutos del partido, esta narrativa fue la que tomó más fuerza. El Castellón dominaba el esférico y en los primeros veinte minutos consiguió las primeras ocasiones. Cubillas, su capitán, remató dis del área a la media vuelta una pelota que acabó saliendo fuera por bien poco, Era un primer aviso del asedio que continuaría minutos después.
De entre la posesión local, el Nàstic consiguió una rendija por donde actuar. Los grana van plantar cara y tuvieron ocasiones de generar jugadas, pero estas murieron cuando se acercaban a la portería rival. Sin embargo, el Nàstic tuvo alguno remado. Aarón Rey pilló en la frontal el rechazo de un córner, pero el chute salió desviado. A los veinte minutos de partido Lupu tuvo que salir mareado y Guillermo entró en el primer cambio que tuvo que quemar a Dani Vidal.
Después de los minutos grana, el Castellón volver a dominar el partido y sus jugadas empezaban a colarse dentro del área, pero entre Manu García, el palo y Quintanilla, el Nàstic se salvaba. Los castellonenses no necesitaban muchas pasadas para plantarse delante de la portería y tuvieron el primer gol en las postrimerías de la primera mitad. La ocasión vino de un contraataque perfecto.
El conjunto blanco y negro se aproximó por la izquierda, Ronald Baas centró en el segundo palo y el remado de Cubillas se estrelló con el palo. La jugada continuaba viva y, con Manu García batido, Koné envió la pelota a las nubes cuando tenía la portería totalmente vacía. El Nàstic se salvó de una buena y tuvo la fuerza de hacer una réplica al instante. La carrera rápida acabó con la pelota en los pies de Eric Montes en la frontal, este se la cedió a Guillermo, que estaba a solas dentro del área. Tenía todo el tiempo del mundo para preparar el remado, pero el chute acabó con muy poca potencia y sin peligro. Esta fue la última ocasión de la primera mitad.
A la reanudación, el partido mantuvo el mismo guion que durante el primer tiempo. De hecho, el Castellón se volvió todavía más protagonista. El conjunto blanco y negro tuvo la primera ocasión muy pronto gracias a una falta lateral. El centro fue al punto de penalti y el remado de Óscar Gil salió por encima del travesaño. Minutos después, llegó el primer susto del segundo tiempo. Marc Trilles detuvo un contraataque rival con una falta que tenía muchas papeletas para ser tarjeta roja, pero el árbitro sólo lo sancionó con una amarilla.
Si el Nàstic plantó cara a la primera mitad y tuvo opciones, a la segunda mitad sólo hubo tiempo para defenderse. El Castellón seguía estrechando la defensa. Cada vez, los locales apretaban el acelerador un poco más. Con tres pasadas, Suero se colocó en la frontal y envió un chute directo que Manu García detuvo. Poco minutos después, Cristian Rodríguez tuvo el gol con una cañería en la frontal del área. Los ataques del Castellón eran feroces, pero la defensa del Nàstic se alzó todavía más. Eso sí, los grana se quedaron romos y las jugadas en ataque morían pocos metros después de atravesar la línea del medio del campo.
Con el paso de los minutos, el Nàstic se hizo más compacto. La defensa grana era impenetrable, pero, sin embargo, Manu García tuvo tiempo de lucir. De León se coló dentro del área y el chute cruzado lo paró al portero grana con el pie. De esta manera el Nàstic salvó un punto que tendrá que hacer buenoen casa contra la Nucía.