El CF Canonja vive con ilusión el ascenso histórico a Primera Catalana

El CF Canonja alcanzó el último domingo un histórico ascenso a Primera Catalana a seis jornadas por acabar la temporada. El Campo de Deportes Municipal se llenó para celebrar una hazaña que, tarde o temprano, se tenía que conseguir, pero llegó en el mejor momento. Los canongins están disputando una gran temporada con 20 victorias, cuatro empates y sólo dos derrotas y, el domingo, pusieron la guinda del pastel. «Necesitábamos que, por la mañana, el Aldeana ganara en la Pobla de Mafumet B y se dio. Éramos conscientes de lo que significaba, si vencíamos en el Tortosa, lo tendríamos, así que rápidamente todo el mundo se organizó y el campo se llenó», explicaba el técnico del CF Canonja, Víctor Quiñones. Además, añadía que «todo el mundo venía con ganas de animar y celebrar, pero primero se tenía que jugar el partido. El equipo mostró la fortaleza de toda la temporada para conseguirlo».

El partido no fue fácil, el Tortosa llevó la iniciativa y la Canonja hizo un fútbol práctico, pero efectivo: «quería los menos riesgos posibles. Con el campo lleno y con tantas expectativas en este día, sabía que las piernas podrían acabar pesando más de la cuenta. Así que decidí por un juego más directo», señalaba. En los minutos finales, el Tortosa marcó el 1-1. «En aquel momento, toda la grada aplaudió a los jugadores y nos levantó. Poco después marcamos el golazo del 1-2. Creo que nunca a la historia se había celebrado con tanto entusiasmo un gol en el estadio» destacaba. El gol desató la euforia, pero no todos la mostraron «me quedé bloqueado. Después del golpe que supuso el empate y el cúmulo de emociones de toda la temporada, con el empate me quedé quieto con dos jugadores más. Fue muy bonito ver cómo jugadores de la plantilla lo celebraban con lágrimas en los ojos», confesaba. Además, Quiñones destacaba que «fue muy ilusionante para todos. Ver a gente de varias generaciones cerrando filas con los jugadores y la directiva emocionaba. Fernando Mañé, el presidente, lleva toda la vida al fútbol base y el ascenso es una alegría también porque nadie apostaba al hecho que iba a crear un proyecto como este y, pocos años después, ha podido recoger los frutos». El técnico de la Canonja también resaltaba la figura de Rubén Gómez: «Al final de la última temporada vimos que necesitábamos a un preparador físico. Rubén ha sido nuestro motor para llegar a esta segunda fase en mejores condiciones que el año pasado».

Por primera vez en 99 años de historia, el CF Canonja completó el ascenso a Primera Catalana. El objetivo de la junta era poder celebrar el centenario en Primera y lo hemos conseguido. Tanto jugadores como cuerpo técnico y junta directiva somos una piña y el domingo fue una alegría inmensa», mencionaba al presidente del club, Fernando Mañé. «Que íbamos a subir estaba asumido por la gran temporada que llevamos, pero la celebración ha llegado en el mejor momento, en casa, con nuestra gente», decía. El proyecto de la Canonja se basa en gente de la casa: «Reunimos jugadores que habían crecido en nuestra base, pero que se marcharon de juveniles o infantiles. Hemos hecho un grupo de trabajo con niños de la base que han sentido el club y se lo han dejado todo», explicaba Mañé.

Después del silbato final, el día de Sant Jordi quedó en segundo plano y las celebraciones se trasladaron del campo a todo el pueblo. La competición continúa y el siguiente objetivo de los canongins es proclamarse campeones de Segunda Catalana, un hito que se podría cumplir este domingo si superan el Ulldecona y el Ebro Escuela no gana en la Pobla B.