Polémica por el beso de Rubiales a una de las campeonas del mundo de futbol
La Generalitat ha pedido a dimisión del presidente de la Real Federación Españyola de Fútbol por el beso «forzado» a Jenni Hermoso
El beso en la boca que dio el presidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), Luis Rubiales, a la jugadora Jenni Hermoso en la ceremonia de entrega de las medallas de la Copa del Mundo a la selección española se viralizó en las redes sociales este domingo.
Mientras toda España celebraba el primer Mundial de la selección y las futbolistas pasaban a recoger la medalla en el Accor Stadium de Sídney, la imagen más llamativa fue un beso de Rubiales a la jugadora, que fue emitido por TVE y pronto comenzó a ser compartido a toda velocidad por las redes sociales. La polémica estaba servida.
«Eh, no me ha gustado. (…) ¿Pero qué hago yo? ¡Mírame a mí, mírame!», ha dicho Hermoso en el vestuario, en unas palabras emitidas en directo a través de Instagram. Por otro lado, Rubiales ha anunciado en el vestuario que regala un viaje a Ibiza a toda la plantilla, un momento que fue emitido en un directo de Instagram de Salma Paralluelo.
Jenni Hermoso zanjó todo lo que se ha desatado tras recibir un beso en la boca del presidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) y pidió que no se le de {más vueltas» y aseguró que fue «un gesto de amistad y gratitud».
«Ha sido un gesto mutuo totalmente espontáneo por la alegría inmensa que da ganar un Mundial. El presi y yo tenemos una gran relación, su comportamiento con todas nosotras ha sido de diez y fue un gesto natural de cariño y agradecimiento», manifestó Jenni en unas declaraciones facilitadas por la RFEF a EFE.
«No se puede dar más vueltas a un gesto de amistad y gratitud, hemos ganado un Mundial y no vamos a desviarnos de lo importante», añadió tras el gran éxito en el Accor Stadium de Sídney.
Piden la dimisión de Rubiales
La Generalitat ha pedido la dimisión del presidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), Luis Rubiales, después del beso forzado a la futbolista Jenni Hermoso durante la final del Mundial que ganó la selección española femenina. Así lo ha reclamado la secretaria de Deportes secretaria general del Deporte y de la Actividad Física, que en declaraciones a Catalunya Ràdio lo ha considerado una «agresión dura». La dirigente del deporte catalán ha instado a «tomar conciencia que hay cosas que no son un precio que tengamos que pagar». Y ha remachado Caula: «La mirada en el fútbol todavía no es igualitaria y nos queda mucho trabajo por hacer».
La secretaria general del Deporte ha defendido la petición de dimisión de Rubiales porque «corresponde a un presidente de federación ser escrupuloso con las formas». Caula ha lamentado que «lo que explica este beso y las declaraciones posteriores que lo justifican es que normalizamos actitudes que no son aceptables».
Sobre la misma cuestión, la ministra de Igualdad en funciones, Irene Montero ha denunciado que el «beso sin consentimiento» es «una forma de violencia sexual que sufrimos las mujeres de forma cotidiana y hasta ahora invisible», y ha avisado que «no lo podemos normalizar». En un mensaje en Twiter, Montero ha situado el consentimiento «en el centro» y ha defendido que «es tarea de toda la sociedad».