El Nàstic quiere reivindicar el Nou Estadi como un fortín ante el Sabadell

Antes del debut oficial del Nàstic esta temporada, Dani Vidal remarcó la importancia de convertir el Nou Estadi en un fortín: «Es fundamental hacerse fuertes a casa y que se escapen pocos puntos de Tarragona», comentó antes de sumar tres puntos ante el Arenteiro. El equipo se ha tomado esta directriz con mucha seriedad y, de momento, ha sumado 6 puntos de los 6 posibles ante su afición. Además lo ha hecho sin encajar ningún gol. Ahora, el reto es seguir reivindicando el coliseo grana como uno de los campos más difíciles de conquistar de la categoría y mantener esta protección de la portería.

Por otra parte, el próximo rival de los granas, el CE Sabadell, prepara sus efectivos para una batalla en la cual necesita empezar a recuperar buenas sensaciones después de un inicio de temporada en el que no acaba de convencer. Los vallesanos suman cuatro puntos con dos derrotas, un empate y una victoria hasta ahora, unos resultados que no acaban de dejar a la parroquia arlequinada tranquila, que empieza a cuestionar a Miki Lladó, el entrenador del equipo, por|para su falta de experiencia a la categoría.

De momento, el equipo sabadellense no ha sido capaz de sumar de 3 lejos de la Nova Creu Alta, pero sí que consiguió sacar un valioso punto del Toralín (el estadio de la Ponferradina) en un gran partido de los vallesanos que finalmente empató el equipo leonés en la recta final.

Los arlequinados han perdido en este inicio de campaña una de las características principales que fundamentaron la permanencia del equipo en el tramo final de la temporada pasada: su fortaleza defensiva.

La pérdida de dos de los pilares defensivos de la plantilla durante la temporada pasada, César Morgado y el vallense Guillem Molina, ha hecho daño al esquema defensivo sabadellense, que, este año, ya ha concedido seis goles en las primeras cuatro jornadas, y no ha dejado la portería de Adrià Ortolà a cero en ninguna.

Peligro en ataque

Los de la Nova Creu Alta han encajado en todos los partidos, pero también han conseguido perforar la red rival en todos ellos, dejando claro que también es un equipo peligroso en ataque. Ahora mismo, el máximo goleador del equipo es Manel Martínez, que ha anotado dos dianas en su retorno al club donde se formó 8 temporadas después de marcharse. El otro gran protagonista del equipo arlequinado es Cristian Herrera, quien pasó por la Pobla de Mafumet la temporada 15/16 y quien, a pesar de no haberse estrenado todavía en el aspecto goleador este año, ya demostró el año pasado el peligro de sus botas al marcar 7 goles desde su llegada en la Nova Creu Alta en enero.

El domingo a las 19.30 h. el Nou Estadi será el escenario de un nuevo derbi histórico catalán en el cual el Nàstic quiere continuar con buen pie para seguir líder.