Mario Rodríguez, el fichaje del Nàstic que espera su oportunidad

El Nàstic ha destacado este inicio de la temporada por el talento acumulado en las bandas. Andy Escudero y los recién llegados David Concha y Jaume Jardí se han convertido en los amos y señores de los extremos grana. Esta competencia ha provocado que a Marc Álvarez, Maurizio Pochettino y Mario Rodríguez sólo les quede el trozo pequeño del pastel de los minutos.

Rodríguez fue una de las apuestas de este mercado de verano. El barcelonés es el único fichaje que llegó al equipo procedente de Segunda RFEF después de una gran temporada con el SD Compostela y, sin contar a Iker Recio, que todavía no ha debutado, es uno de los fichajes que menos ha utilizadoDani Vidal. El extremo ha disputado 45 minutos en cinco partidos. En todos ha salido desde el banquillo como revulsivo con el papel de desencallar el ataque grana. Aunque casi no ha estado más de un cuarto de hora sobre el césped en cada uno de ellos, Rodríguez ha aprovechado el tiempo para mostrar una de sus cualidades: la capacidad de driblar.

Contra el Rayo Majadahonda se cuando brilló más. El barcelonés encaró portería desde la banda izquierda. Fue valiente y, a pesar de tener tres defensores encima, con dos movimientos tuvo suficiente para encontrar un agujero de la nada y rematar a puerta. Sólo los dos palos evitaron que su jugada acabara con premio.

Contra la Ponferradina también tuvo su oportunidad. En las postrimerías del partido, Rodríguez lideró un contraataque y, de nuevo, se deshizo del defensor rival, aunque su definición no encontró puerta. El extremo barcelonés ha demostrado talento y, con la entrada en escena de la Copa del Rey, Mario Rodríguez podría tener su oportunidad para elevarse y salir de la sombra de Jardíy Concha.